Debido al incremento de participación de autos de procedencia extranjera en hechos delictivos, desde la semana pasada el Gobierno del Estado junto con la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Hermosillo, dieron inicio con un programa de decomiso de los llamados “carros chuecos”.
La Coordinación Ejecutiva de Verificación al Comercio Exterior (CEVCE) informó que en la búsqueda de garantizar seguridad e inhibir la ilegalidad combatiendo el tránsito de los vehículos que infrinjan la ley, se intensificará la detección de autos con reporte de robo e involucrados en hechos delictivos.
Dio a conocer que no será una “cacería de brujas” contra autos ilegales, por lo que se aseguró que entendiendo que hay quienes han adquirido una unidad como patrimonio y le dan uso familiar, solo se decomisará autos de lujo, deportivos o de gama anterior al 2010.
“El decomiso tiene únicamente el sentido de seguridad, por lo que aseguraron que no afectará el patrimonio de las familias que verdaderamente ocupan un carro” se dio a conocer a través de un comunicado.
Por tal motivo, Omar González, coordinador estatal de CEVCE, invitó al ciudadano a colaborar en este trabajo de seguridad que las autoridades realizan y dio un plazo de 10 días aproximadamente para que los usuarios de este tipo de vehículos se pongan al corriente y cuenten con licencia y seguro.
Otra de las opciones que el ciudadano tendrá para contribuir en este proceso de legalidad, dijo, es regresar sus vehículos a su lugar de origen (Estados Unidos), para lo cual pueden notificarse ante CEVCE.
DIO INICIO EN HERMOSILLO
El comisario general de Seguridad Pública, Luis Alberto Campa Lastra, dio a conocer que tan solo en 2018 y 2019, en Hermosillo, más de 1 mil 160 vehículos han participado en hechos de tránsito, sin contar con placas o que tienen carnets de afiliación o placas extranjeras.
“Además que muchos de estos autos o sus conductores no respetan las normas que nos rigen en materia de tránsito o se responsabilizan de hechos en los cuales han participado”.
Puntualizó que no es una cacería contra vehículos afiliados, ya que la gran mayoría de estas unidades son utilizadas por familias o para el trabajo, pero los usuarios deberán cumplir al igual que cualquier otro conductor como portar la licencia vigente, estar registrado y el auto debe conducirlo la persona que realizó el empadronamiento, respetar la Ley y el Reglamento de Tránsito.