Hasta ayer no había sospechoso alguno en relación a la muerte del comunicador Santiago Barroso Alfaro, de 47 años, quien fue sorprendido en su domicilio cerca de las 9 de la noche por un tipo que llamó a la puerta.
Decenas de agentes hicieron revisión del área en busca de pistas, así como de las posibles rutas que tomó el pistolero para huir, mismo que hizo cerca de 10 disparos.
Barroso Alfaro recibió 3 balazos, uno a la altura de la clavícula izquierda y 2 en abdomen, y según las investigaciones, alcanzó a correr hacia el interior de su casa para solicitar vía telefónica una ambulancia, siendo posteriormente trasladado a la clínica 12 del Seguro Social, donde lamentablemente falleció cerca de las 11 de la noche a pesar del esfuerzo puesto por el personal médico.
El reporte de la balacera en el 911 fue recibido a las 08:56 de la noche, movilizándose inmediatamente hasta la residencia de la familia Barroso los agentes del sector, quienes al confirmar solicitaron una ambulancia.
Gravemente herido fue llevado en ambulancia de la Cruz Roja a la clínica 12 del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde inmediatamente fue pasado a quirófano para intervención quirúrgica a fin de tratar de salvarle la vida, ya que había recibido dos balazos en abdomen y 1 a la altura de la clavícula izquierda.
El lugar de los hechos, callejón Sinaloa entre calle 7 y 8 se vio poblado por personal de Policía y Tránsito, Agencia Ministerial de Investigación Criminal y Policía Estatal de Seguridad Pública, quienes se encargaron de buscar domicilios donde existiera sistema de videovigilancia, todo con el fin de tratar de obtener datos del agresor y del vehículo en el que se dio a la fuga.
Por no haber sido hallados casquillos en el área donde fue la balacera, la policía sospecha que el asesino utilizó un revólver.
El gremio periodístico se encuentra exigiendo a las autoridades que el caso sea aclarado y que el o los responsables sean castigados.