Ayer, a las 2.45 de la tarde finalizó el juicio oral por el delito de homicidio calificado en contra de Martín Iván “N”, por quien la fiscalía busca que se le castigue con la pena máxima que podría pasar los 50 años.
Pero la defensa está luchando porque se le declare inocente de los cargos presentados por los fiscales.
Al ser reiniciado el juicio a la 13.03 horas, el acusado Martín Iván solicitó que se le mostrará el arma blanca con la que fueron asesinados Karina “N”, de 23 años y Omar “N”, “El chore”, de 20, en el domicilio del callejón San Francisco entre calles Emilio Carranza y San Francisco.
Pero la juez inmediatamente le hizo la aclaración que esa etapa del juicio que inició a las 10 de la mañana del martes de la semana pasada y que fue suspendida hasta las 8.30 de la noche, ya había sido cerrada.
También se hizo ver que no fue posible la obtención de las huellas dactilares de Gustavo “N”, quien ya está purgando la condena de 35 años por el homicidio en el Cereso local, porque los vigilantes no lo autorizaron a los fiscales.
Martín Iván en todo momento se defendió señalando que no participó en el doble crimen a causa de que estuvo fuera de la casa y solo acompañó a Gustavo en el momento de la huida, desconociendo lo que había pasado.
La audiencia del fallo de culpable o inocente se llevará a cabo este viernes a la 1 de la tarde y este mismo día la juez habrá de determinar la fecha que se dará lectura de sentencia en caso de que se determine culpabilidad.
El crimen fue perpetrado el 10 de noviembre del 2017, y al llegar la policía al domicilio, en un principio sospechaba que se trataba de un suicidio, pero después durante las investigaciones se pudieron encontrar elementos que revelaban el doble homicidio, por lo que inició la búsqueda de los principales sospechosos.
En fuerte operativo fueron arrestados Martín Iván y Gustavo, aceptando éste último su responsabilidad y en juicio abreviado aceptó los 35 años de cárcel ofrecidos por la Fiscalía.