Aunque los cientos de voluntarios que participaron en la búsqueda por cinco días de Itzel Nohemí Quiroa, de 7 años dejaron de operar, ahora elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal habrán de acelerar las indagaciones para tratar de aclarar lo que sucedió.
Rumores en las redes sociales crearon confusión en la búsqueda, por lo que el trabajo de la policía no pudo avanzar con la celeridad debida.
Hasta el momento solo se sabe que la pequeña portaba al salir del hogar, vestido de tirantes color rosa y con estampado de flores, así como zapatos rosas.
Los agentes que están trabajando en el caso no descartan la idea de que la menor se la hayan llevado o bien que la tengan encerrada en algún domicilio local.
Las imágenes captadas por cámaras de seguridad de unos domicilios indican que la niña corría, por lo que se cree que se dirigía a algún lugar a petición de alguien.
La policía continúa solicitando el apoyo de la ciudadanía para tratar de saber si subió a algún vehículo, ya que el can rastreador utilizado por el grupo de búsqueda señaló su camino hasta la calle 47, en área pavimentada. Cualquier llamada deber hacerse al 911.
Los policías ministeriales locales con apoyo recibido de otras bases operativas, así como de la Policía Estatal de Seguridad Pública, están intensificando las investigaciones, todo con el fin de localizar a la niña que desapareció desde el jueves de la semana pasada.
Ya fue revisado el canal de la mesa arenosa hasta el área del Sifón y gran parte de zona desértica por un grupo aproximado de 3 mil elementos, ciudadanos locales y provenientes de otras partes del país, policías y militares, y no ha sido encontrada.
El director de Rescate de Sonora Internacional, Eleazar Montes agradece el apoyo de una empresa local que les proporcionó importantes cantidades de gasolina y diesel para la búsqueda.
