Venía a buscar a su mamá y se quedó en San Luis

Hace 38 años, Don Toño decidió convertirse en su propio patrón poniendo una taquería en el centro de la ciudad, logrando atraer a clientes no solo de esta ciudad sino de otras de la región

Gloria Negrete

  · jueves 29 de noviembre de 2018

Se empieza a atender a la clientela a las 7:00 de la mañana. / Alonso Moreno

Hace 52 años, cuando tenía 18, Antonio Ortega Vargas llegó a San Luis Río Colorado, procedente de Las Varas, Nayarit, en busca de su señora madre y también con la intención de cruzar a Estados Unidos para colocarse en un empleo que le permitiera tener una vida digna.

Así lo platicó Socorro López Flores, esposa de Antonio Ortega, mejor conocido como Don Toño, propietario de una taquería desde 1980, ubicada en la avenida Madero y calle Morelos.

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Debido a problemas de salud, Don Toño ya no acude todos los días a la taquería, pero sí se mantiene al tanto del funcionamiento del negocio que con tanto esfuerzo fundó hace 38 años y en el cual se encarga, todavía, de preparar la birria de res que ofrece en venta a sus clientes.

EN 1980 INICIÓ SU NEGOCIO

Socorro López indicó que su esposo le contó que, al llegar a esta ciudad, afortunadamente localizó a su mamá que se había venido de Nayarit a San Luis porque su padre había fallecido.

Además, Antonio Ortega logró pasar al vecino país del norte donde trabajó durante un tiempo y después se regresó a San Luis para desempeñarse como empleado en una empresa constructora de pozos.

Fue en 1980 cuando tomó la decisión de iniciar su propio negocio de venta de tacos y órdenes de birria de res, invirtiendo sus ahorros en la compra de una “carretita”, mesas, sillas y el mobiliario necesario para empezar a atender a los clientes.

En sus inicios la taquería de Don Toño estaba sobre el pavimento y años después, debido a las nuevas disposiciones de las autoridades municipales, tuvo que subir la carreta a la banqueta y quitar las mesas y sillas que tenía para los comensales.

SU ESPOSA ERA CAJERA DE SUPERMERCADO CUANDO SE CONOCIERON

El trabajo de la taquería no es fácil porque requiere mucha dedicación, pues Don Toño pone a cocer la carne a las 10:00 de la noche y la retira del fuego a las 4:00 de la mañana para prepararla y abrir a las 7:00 el local todos los días de la semana.

Por 38 años, Antonio Ortega se ha dedicado a atender a sus clientes, la mayoría son sanluisinos, aunque también lo visita gente del valle y de ciudades cercanas del estado de Arizona atraídos por el rico sabor de la birria que prepara.

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Socorro López reveló que no hay alguna receta especial que use el señor Toño a la hora de cocinar la birria, solo es la sazón que tiene para prepararla lo que hace que les guste a los clientes.

Socorro se integró al equipo de trabajo de la taquería hace 24 años, al conocer a Don Toño cuando ella trabajaba como cajera en un supermercado que Antonio frecuentaba para realizar las compras diarias para la birria.

“A mí me gusta mucho estar aquí en la taquería, me gusta porque platico con la gente. Vienen a visitarme mis familiares y se quedan un rato. Además, disfruto el trato con los clientes”, expresó la señora López.

Una de las principales satisfacciones que le ha dejado este trabajo es haber sacado adelante económicamente a sus dos hijos, la mayor de 27 años de edad, es profesora y el menor, de 20, empleado.

“Tenemos clientes que vienen a la taquería desde que se inició, muchos de ellos nos dicen que no han dejado de venir porque no se ha perdido la sazón de la birria”, apuntó Socorro López.