La propuesta efectuada por el Comisionado Nacional de las Adicciones, Gady Zabicky Sirot, de establecer la edad mínima a 21 años para consumir alcohol y tabaco, es una medida que, de aprobarse como Ley, ayudaría a retardar los problemas de adicciones en los adolescentes y jóvenes mexicanos.
Así lo considera Laura Martínez Dunstan, directora del Centro Especial para Adictos (CEA) mujeres, pues los usuarios de drogas ilegales por lo general se inmiscuyen en el mundo de las adicciones a través de la ingesta de alcohol y posteriormente fuman marihuana para pasar al uso y consumo de drogas “duras” como el cristal, metanfetaminas, cocaína, heroína y otras.
Laura Martínez destacó que, en el CEA a su cargo se atienden actualmente 42 mujeres, de ellas 6 son menores de edad que tienen entre 12 y 17 años que llegaron a esta institución al presentar adicción a la marihuana y el cristal.
Informó que, generalmente, los adolescentes se inician en el mundo de las adicciones a las drogas por curiosidad, por el deseo de experimentar nuevas emociones y también influenciados por su pareja sentimental o para bajar de peso, en este último caso lo hacen con el cristal, sustancia de la cual, algunas, “se enganchan”.
Habló del tratamiento que se brinda a las menores de edad, a quienes se aparta de las mujeres adultas en dormitorios y sesiones exclusivas, ya que con las adolescentes se tratan temas relacionados a prevención de embarazos, regreso a la escuela, relaciones familiares, aplicación de vacunas contra el virus del papiloma humano, entre otros.
“A las menores de edad hay que reconducirlas a su vida. Por eso hemos puesto en marcha programas de reinserción social, capacitación laboral, superación personal, seguimiento y monitoreo”.
Laura Martínez reiteró que la propuesta del Comisionado Nacional de las Adicciones sería, de aprobarse, muy benéfica para la sociedad mexicana, si se toma en cuenta que la edad legal para vender alcohol se fijaría a los 21 años.
Las adicciones a las drogas no es un problema exclusivo de los varones, también las mujeres las consumen y en los últimos años se ha notado un incremento en la cantidad de adolescentes usuarios de este tipo de sustancias, lo cual se debe al fácil acceso que se tiene a éstas.