Para los pasajeros sanluisinos es muy frecuente que olviden diversos objetos en los taxis, principalmente, aunque también ocurre en las peseras, desde carteras, celulares, hasta el mandado en la cajuela del auto dejan extraviado quienes usan esas unidades.
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El delegado de Transporte Geovany Valtierra Herrera, informó que es fundamental, que antes de subirse a la unidad, vean el número económico de la misma, para en caso de que ocurra cualquier incidente, puedan identificarla.
“Con el número de la unidad en la base de datos, podemos dar con el operador, o le marcamos al concesionario”.
Agregó que eso facilita las cosas para la localización del responsable de la unidad, dando el lugar y la hora del servicio.
“Si nos dicen que fue a las 3:00 de la mañana, en la unidad 151, y lo llevó a la colonia Chulavista (por ejemplo) podemos dar con el operador y podemos citar aquí en la oficina con el reportante, para que entregue el objeto extraviado.
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SE LES OLVIDÓ UN NIÑO
A diferencia de los objetos que la gente deja olvidados en un auto, a Jesús Gaxiola le pasó algo muy inusual, y es que, cuando hacía su viaje a su casa en un taxi, se dio cuenta que a una familia se les olvidó su hijo de 5 años a bordo de la unidad.
Relató que cerca de la 01:00 horas salió de su trabajo en una tienda de conveniencia, abordó un taxi que lo llevaría a su casa, en él, venía también una familia.
“Íbamos mi compañero y yo, además de la familia, el taxi dejó primero a mi amigo y acordó el chofer llevar primero a la familia, estuve de acuerdo; llegamos a su destino, y se bajaron, pero no se dieron cuenta de que el niño se quedó dormido en el auto”.
Dijo que, llegando al fraccionamiento Chulavista, sacó su cartera, pero se le cayó, se agachó a buscarla y tocó el zapato del niño.
“Yo me asusté, el chofer iba hablando por teléfono y no me hacía caso; cuando se dio cuenta, él se asustó también, creía que lo iban a acusar de secuestro, tomé video de lo ocurrido, como una forma de respaldarme para evitar problemas”.
Comentó que como el taxi era de base, se quedó grabado el número de celular de la mamá, le habló, y acordaron llevar al niño a la dirección, pero en el camino, el chofer iba muy nervioso.
“Finalmente, le entregamos el niño a la mamá y ella muy contenta, no hubo reclamos; me llevó a la casa, pero íbamos muy callados”.
Sí se han presentado problemas de objetos olvidados en los taxis, hay formas de recuperarlos, pero nunca se había dado el caso de un menor que se quedara en él, por fortuna, está sano y salvo.