La tarde del viernes, la Patrulla Fronteriza de Arizona detectó a uno de los grupos de niños más grandes del que se tenga registro, cuando se trata de cruces ilegales por parte de menores no acompañados.
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Fue un grupo de 90 menores de edad, que, de acuerdo con John R. Modlin, jefe interino de Oficina de Aduanas y Protector Fronteriza (CBP) en el Sector Tucson, se entregaron a las autoridades, tras pasar horas expuestos al calor a la altura de Sasabe.
En total poco más de 100 personas, de las cuales la gran mayoría eran menores originarios de Guatemala que viajaban sin la compañía de un adulto, mismos que hoy están bajo el resguardo de las autoridades de Estados Unidos.
Contrario a los adultos o menores que viajan con algún familiar, los que cruzan solos la frontera son retenidos en Estados Unidos a un proceso distinto que va desde ser repatriados o hasta ser entregados a familias que ya estén en suelo norteamericano.
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