Un choque la inspiró a ser socorrista

Ana Lilia Villegas tiene 16 años de servicio, ser testigo de un accidente donde una joven murió la hizo decidirse, considera que es una labor llena de sabores dulces y amargos

Brenda Román

  · lunes 24 de junio de 2019

Ana Lilia es una dedicada socorrista de la Cruz Roja / Alonso Moreno

Hoy se celebra el “Día del Socorrista”, hombres y mujeres dedicados a ser los primeros intervinientes en un accidente y en muchos casos significan una salvación para quienes son protagonistas de un choque, donde los minutos significan vida o muerte.

En San Luis Río Colorado la Cruz Roja Mexicana es el organismo que tiene a los técnicos en urgencias médicas con mayor preparación, este es el caso de Ana Lilia Villegas Flores, quien luego de presenciar un accidente donde dos jóvenes murieron, tomó la determinación de sumarse a los socorristas.

Estudiantes del valle sanluisino corren el riesgo de quedarse sin plantel de bachillerato cercano a las comunidades que habitan / Cortesía

Tenía 31 años cuando comenzó, a 16 años de su inicio, y a pesar de los sacrificios para cumplir con su deber, sigue firme y no se arrepiente de su trabajo.

Comentó que ser socorrista voluntaria no es sencillo, tuvo que cumplir con muchos cursos, actualmente concluyó la capacitación como Técnico en Urgencias Médicas.

14 BEBÉS

Ana Lilia es una mujer casada, su esposo es Ricardo, quien la apoya en su vocación de socorrista, tuvo dos hijos, Ricardo de 31 años, quien la hizo abuela, y Karinita quien en octubre del año pasado falleció, también fue voluntaria de la benemérita institución, ella padeció síndrome de Down.

Dentro de los aspectos tristes de su profesión recordó el caso de un niño quien falleció en un accidente en la carretera San Luis-Sonoyta, tuvo que consolar a la madre quien presenció su muerte.

Ser un paramédico también tiene sabores dulces, Ana Lilia compartió que ha ayudado a traer al mundo a 14 bebés y está lista para la llegada de su “quinceañero”.

“Hace un tiempo auxilié en un choque con muchos pequeños, tiempo después estaba en el ‘super’, un niño corrió a hablarme, me preguntaba si me acordaba de él, al ratito llegó su mamá para agradecerme por haberlo salvado, fue algo muy grato”, expresó

Agregó que por deber ha sacrificado vacaciones, navidades y días festivos, pero su familia la entiende y apoya.

FUERZA

Ana Lilia es una de las seis mujeres socorristas de Cruz Roja, de tener la posibilidad de decidir, elegiría haber entrado más joven a la institución.