Pérdidas de más de dos mil pesos, es lo que registraron algunos comerciantes, que venden sus productos en el Tianguis del Parque La Tortuga, debido a que los fuertes vientos que azotaron el pasado domingo, les impidió instalar sus puestos.
El encargado de la organización de los tianguis, Luis Encino, comentó que solo algunos tianguis se instalaron en los alrededores del Parque Bicentenario, mejor conocido como La Tortuga, ya que son estos los que su único ingreso se obtiene 100 por ciento de la venta de sus artículos en este mercado.
Comentó que hay personas que perdieron de dos mil hasta los cinco mil pesos o más, pero que no se puede tener un monto exacto ya que varía los precios de los que comercializan y también varían los productos.
Agregó que normalmente el tianguis se instala desde las 10:00 o 12:00 horas del día, sin embargo a las 14:00 horas, todavía no había un solo comerciantes instalado, pues acordaron esperarse por lo menos hasta las 17:00 horas para ver si bajaban los fuertes vientos.
En un recorrido por este mercado, se pudo observar personas que se instalaron por la Calle 33, en donde se podían encontrar puestos de venta de ropa, así como venta de alimentos, los cuales reportaron gran afluencia de consumidores.
María Ortiz, dijo que ella decidió ponerse a pesar del clima, ya que este negocio es con el que mantiene a su familia y de donde “saca” para los pagos y gastos que se tienen que hacer durante la semana.
“Lo bueno que sí vino gente, es que la gente sabe que pocos puestos, pero nos vamos a poner, y pues se van pasando la voz de que si nos pusimos; en mi caso tengo que ponerme porque de aquí saco para el gasto de la semana, lo bueno que el miércoles también podemos venir”.
El director de Protección Civil y Bomberos, Ricardo Trigo Ramírez, dijo que se hizo una recomendación a Inspectoría, que es la dependencia que tiene enlace directo con los tiangueros, para que avisara a los comerciantes la situación en la que se comportaría el clima, ya que el pronóstico del tiempo, anunciaba fuertes ráfagas de viento y esto podría poner en riesgo la integridad de los vendedores como consumidores.