En la época de verano aumenta la cantidad de personas que visitan las casas de empeño para obtener dinero, sobre todo, para salir adelante con los gastos de graduación de sus hijos y para solventar otros que se suscitan dentro del hogar.
Empleados de algunas casas de empeño coincidieron al señalar que, en los meses de junio a septiembre, se nota una mayor presencia de clientes que dejan sus prendas a cambio de dinero en préstamo, mientras que en invierno son más los que acuden a comprar.
Principalmente empeñan consolas de videojuegos, celulares, televisiones, herramientas eléctricas portátiles, computadoras y otros que, por lo general, los clientes recuperan al poco tiempo, ya que es mínima la cantidad que los “pierde” por falta de pago del préstamo.
Los artículos que dejan los clientes al no cubrir el monto del dinero que les fue prestado, son puestos a la venta.
Claudio Garibaldi, empleado de una casa de empeño, resaltó que en verano son muy visitados por gente que está en “apuros” económicos y llevan a empeñar artículos que tienen en su hogar.
Por otro lado, Dayana Aguilar, empleada, dijo que en diciembre los sanluisinos visitan las casas de empeño para buscar regalos, especialmente, solicitan videojuegos, calentadores eléctricos y computadoras, mientras que en febrero se vende más la joyería para obsequiar el Día del Amor y la Amistad.