En los cruceros más transitados de diversos fraccionamientos o esquinas con mayor afluencia de las colonias de San Luis Río Colorado, durante todo el año, pueden verse desde muy temprano instalaciones que van desde lo más austero hasta lo más pintoresco, como mesas con recipientes térmicos o hieleras y carretas en las que sobresalen los sonidos de una plancha caliente y los olores de algunos ingredientes como carne de res con chile colorado, nopales, chicharrón prensado, papas con chorizo y hasta frijoles, luego servidos y envueltos en una característica tortilla de harina, dando origen a los famosos “burritos” de guisado, tan solicitados por los ciudadanos.

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Tal es el caso del comerciante Jorge López, fundador de un negocio en una concurrida carreta de tacos que lleva su nombre (aunque en inglés), quien compartió que su proyecto comenzó como suelen iniciar quienes emprenden una idea para deleitar paladares y brindar un desayuno rápido y “llenador”: En una carretita, sobre la banqueta de una transitada calle, con recipientes donde reposaban diversos guisados para la elaboración de los tacos callejeros.

El 7 de octubre del 2010 logró encantar a su primer cliente, recordó, enunciando que fue un proyecto con su hermana y una prima.

Estábamos afuera de esta casa, sobre el callejón Revolución y calle 12, sirviendo ‘burritos’ en una carretita, donde también hacíamos las tortillas de harina. Con el paso de los años decidimos meternos y ampliar, aparte de que ya no nos permitían estar sobre la banqueta. Aunque lo hicimos, seguíamos haciendo la misma calidad de tortillas, aunque ahora con un menú que contaba con gorditas y tortillas de maíz

SAZÓN CASERA EN LA CALLE

A su vez, Jorge destacó que el trabajo en equipo y la sazón casera poco a poco los ha ido reconociendo como propuesta gastronómica callejera.

“Hemos triunfado gracias a la sazón de mi hermana; prácticamente estamos aquí por ella. Yo solamente ayudo a hacer los tacos, ella es quien en realidad da el sabor y cocina todo. Después de todo, aquí seguimos”.

Acerca de esto, María Rita López Galindo, la encargada de preparar diariamente a las 2:00 horas más de 15 guisados para un estimado de 400 “burritos”, compartió que lo más vendido o solicitado por los comensales es el chicharrón prensado en salsa roja, la carne de res deshebrada con verdura y las papas con chorizo, en ese orden, platillos comunes en cualquier punto de venta de este tipo, con precios accesibles.

“La gente siempre busca comer algo así, por eso nos va bien. Un buen fin de semana entre sábado y domingo podemos lograr la venta de aproximadamente 1 mil 500 ‘burritos’. Cocinar desde la madrugada y llegar barrida hasta las 7:00 horas, con los clientes ya haciendo fila en nuestra carretita es cansado, pero muy satisfactorio por los comentarios de quienes gustan de este tipo de desayunos”.

También externó que al aumentar la venta de los tacos decidieron contratar personal. “Inicialmente, llegábamos a vender 90 tacos, luego 120 o 150. Llegando diciembre del primer año ya vendíamos más de 200 tacos”.

“En un día bueno hemos recibido hasta 300 clientes; entre sábado y domingo atendemos un promedio de 500”.

COSTO FINAL SEGÚN INGREDIENTES

A su vez, compartió la entrevistada que en el 2010 vendían a 10 pesos el taco de guisado, un precio muy distante al que tienen actualmente de 25 pesos.

Dicha alza en el costo debido al incremento de costo en ingredientes clave como la manteca, el frijol y el tomate, citó. “Lo hemos estado subiendo a como nos suben los ingredientes. También el chicharrón y la carne deshebrada nos han subido de precio. Batallamos al principio, porque era poco lo que se vendía y entonces subió el precio de la harina, la manteca y el frijol”, situación que, sin duda, afecta a todos los vendedores de “burritos”.

UNA OPCIÓN PARA TODOS LOS GUSTOS

Respecto a la tendencia local de la apertura de diversos puestos en esquinas para la venta de “burritos”, Rita compartió que: “Todos tenemos que hacerle la lucha” y desde que sale de su casa hasta cualquier lado que vaya ve uno en cada esquina, haciendo sus propuestas y vendiendo tacos.

“En algunos he visto que les ha ido bastante bien, porque observo que siempre tienen clientes. Así como a mí me ha ido bien, espero que a todos los vendedores de burritos también”.