En la capacitación que cada mes se ofrece a los socorristas de la delegación local de la Cruz Roja Mexicana, en julio se abordó el tema de intoxicación, con la finalidad de que actualicen sus conocimientos y estén mejor preparados para atender el llamado de auxilio de la sociedad.
De acuerdo a lo informado por el jefe de socorros de la benemérita institución, Miguel Padilla Lugo, se cuenta con un plan de capacitación el cual consiste en impartir un tema cada mes, con la ayuda de expertos en cada uno de los aspectos que se abordan, que por lo general son personas ajenas a la Cruz Roja Mexicana.
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Dijo que a estos cursos se integra a la totalidad del personal que colabora con la Cruz Roja-San Luis, cuya cantidad actualmente es de 46 socorristas y están por incluirse 9 voluntarios más.
En la capacitación del mes de julio se trató el tema de intoxicación, a cargo de Josué Oliveros, quien habló ante poco más de 40 socorristas de cómo tratar a un paciente que sufre intoxicación por humo, alimentos o por medicamentos.
Miguel Padilla señaló que el plan de capacitación de cada mes se hace con el apoyo del encargado del área de capacitación, Roa Salazar. Añadió que desde marzo se habían establecido los temas de cada mes y se tenía agendado impartir el curso de intoxicación para julio. Mientras que para agosto el tema del que se hablará será evaluación primaria y evaluación secundaria de las personas enfermas.
INTOXICACIONES, CAUSAS DE ATENCIÓN EN URGENCIAS
Las intoxicaciones son una de las principales causas de atención en el servicio de urgencias y en muchos de los casos son intencionales al ser un instrumento para intentar quitarse la vida, advirtió el jefe de Toxicología Clínica del Hospital Juárez de México (HJM), Jesús del Carmen Madrigal Anaya.
El especialista detalló que existen múltiples agentes causales de intoxicación. En las áreas rurales los más comunes son la mordedura de serpiente, piquete de insecto o de arácnido y plaguicidas. En las ciudades es por consumo de sustancias químicas, medicamentos, alimentos procesados, bebidas alcohólicas y tabaco.
Madrigal Anaya explicó que las personas que sufren una intoxicación se realizan pruebas en sangre e historia clínica para determinar el tipo de sustancia y el grado de envenenamiento, porque en ocasiones el agente nocivo se encuentra en algún alimento que consumió o producto que inhaló que aparentemente no es dañino, aseguró.
Madrigal Anaya precisó que en caso de envenenamiento las personas deben acudir de inmediato a alguno de los 23 centros toxicológicos o a las unidades médicas, para recibir tratamiento que disminuya o evite daños irreversibles e incluso la muerte.
