La señora Silvia Viveros Mosqueda es un ejemplo de amor al prójimo ya que hace 11 años instaló en su casa el comedor comunitario “Estrellita milagrosa” para servir desayuno y comida a decenas de niños y niñas que habitan en la colonia Reforma.
Entérate: Federico Iglesias, apasionado de la historia de SLRC
Esta labor la emprendió con la finalidad de compartir los alimentos que cocinaba, con los estudiantes que a diario pasaban por su casa rumbo a la escuela.
“Así empecé, ofreciendo desayuno a tres o cuatro niños, pero con el tiempo fueron aumentando. He llegado a tener hasta 50 niños sentados en el comedor”, destacó.
En la actualidad, debido a la pandemia, Silvia Viveros optó por llevar la comida a los domicilios de los niños y las niñas que a diario iban a desayunar al Comedor Comunitario.
Gracias al apoyo de su familia y de algunas personas externas que colaboran con ella, ha podido continuar con esta noble labor que emprendió hace poco más de una década.
RECIBE LAS NOTICIAS DE TRIBUNA DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ