El mal uso del teléfono celular al conducir un vehículo en movimiento puede considerarse un “arma mortal”.
Solo basta utilizar el celular durante siete segundos para provocar un fatal accidente, esto debido a que, en este lapso de tiempo, el vehículo puede avanzar hasta 200 metros, tiempo y espacio en los que el conductor distraído no solo pone en peligro su vida, sino la de otros conductores y transeúntes en la zona.
Con tan solo 20 segundos de distracción se incrementa de manera considerable el riesgo de exposición a un choque, un atropellamiento o cualquier accidente derivado de alguna imprudencia al volante, como podrían ser: Tomar una fotografía o ´selfie´, mandar un mensaje de texto, hacer una llamada o revisar las redes sociales.
Debido a esto, el comisario de Seguridad Pública, Gerardo Camacho Ramírez enfatizó en la importancia de que que la ciudadanía, en especial los jóvenes, dimensionen las consecuencias que trae consigo el verse implicados en un accidente vial, al combinar el volante con el uso imprudencial del teléfono celular.
Cabe señalar que, más allá de provocar un incidente por distraer la atención de la persona que va manejando, utilizar el celular mientras se conduce no permite reaccionar a tiempo ante algún imprevisto, escenario que se ha convertido en uno de alto riesgo, según las estadísticas compartidas por el Comisario Camacho.
Finalmente, el Comisario Camacho Ramírez sugirió a la ciudadanía en general que, en caso de que se requiera utilizar el celular, se proceda a orillarse y detener el vehículo para contestar alguna llamada o revisar algún mensaje, por otro lado, también exhortó a evitar otras distracciones como maquillarse o escuchar música a volumen demasiado alto mientras se conduce, así como estar atento a señalamientos de tránsito en general.