Para arreglar cada pozo particular en el valle, se requieren por lo menos 4 millones de pesos para dejarlo en óptimas condiciones.
El dirigente de los pozos particulares Martín Salgado Ames, declaró que en la actualidad hay 50 pozos particulares en el valle, y de esos 20 están operando a 20 o 30 por ciento, y otros 10 se encuentran de plano fuera de servicio.
“Mas de la mitad de los pozos no está al 100 por ciento, esos que están operando bajo tienen que seguir en funciones, porque de alguna manera tienen que sacar dinero para el mantenimiento adecuado para ellos”.
Agregó que ha habido ciertas reparaciones hasta cierto punto menores para esos, que han sido de 200 o 300 mil pesos, ya sea para limpiar las tuberías que ayudar a extraer el agua, o bien, los motores que utilizan para funcionar.
Dijo que, en el valle de Mexicali, existen pozos, mas no en la mancha urbana, y no se recomienda perforar cerca del mar, porque eventualmente se va a extraer agua salada y esa no sirve para riego de cultivos.
De los 106 pozos federales que existen en el valle de San Luis, 84 están en el Módulo #1, 11 en el 2 y 11 en el tres, es decir, entre más se acercan al mar ya no se permite perforar.
Una de las recomendaciones para seguir recibiendo el subsidio de electricidad del pozo, es que se renueven su documentación ante la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), porque la ventanilla se cierra el 31 de octubre.
“El detalle es que si no se renuevan pueden perder el subsidio y eso los va a ahorcar, si se tiene el apoyo, un pozo gasta en promedio mil 200 pesos diarios de luz, en cambio, si no lo tiene, puede dispararse a 7 u 8 mil pesos diarios, es una enorme diferencia y de plano es mejor no sembrar”.
Este subsidio también aplica a los pozos federales, porque si se pasan, se quedan sin agua, y como los recursos que tiene la Sader vienen a través de la Secretaría de Hacienda, ella está al pendiente de que se usen bien.
Se requiere la renovación de la documentación para quedar dentro del subsidio de CFE, de lo contrario, los gastos de operación crecen desmesuradamente, que hacen imposible las siembras.