Se refrescan Sanluisinos con jugo de tomate preparado

Como un negocio que comenzó con una sociedad familiar hace 20 años, Adán Ávila fundó con apenas una carretita

Óscar Gómez

  · sábado 11 de mayo de 2019

Un negocio familiar en el gusto de los sanluisinos / Óscar Gómez

Lo que surgió hace 20 años como una idea para refrescar al sanluisino en temporada de altas temperaturas, Adán Ávila y familia se dedicó a idear un concepto en el que consentirían a cientos de personas con una bebida preparada con el tradicional jugo de tomate, iniciando con una carreta en un predio en la avenida Obregón y calle 22, con espacios para la elaboración de cocteles y botanas, un negocio que ha beneficiado a sinnúmero de clientes con bebidas ideales después de trasnochar o para el disfrute de una tarde al sol en familia.

“Después de algunos cambios nos trasladamos al parque Solidaridad, donde ya tenemos cinco años.” destacó Andrea Bautista, en representación de su fundador y quien funge como empleada del local junto a Rogelia Núñez. Ésta última, destacando que: “Tenemos una receta secreta que nos ha mantenido en el gusto de la gente por años.”

Desde hace un año, en el parque de la colonia Solidaridad se realiza cada sábado un desayunador comunitario. /Oscar Gómez

“Utilizamos ingredientes como saladitos, apio, lanza o dulces de chile, chile seco, limón y pues lo básico como pepino y distintas salsas, así como el camarón y la carne seca.” dijo Andrea, mientras Rogelia hacía una mezcla de jugo de tomate con los ingredientes, agregándolos en un vaso con hielo para después verter una mezcla de salsas propias de la receta secreta de la familia, y terminar adornando con una ración de camarones y apios para luego consentir a un par de clientes que se acercaron durante la entrevista.

La bebida se prepara con camarones o carne seca, jugo de tomate, hielo, apio, saladitos y una mezcla secreta de salsas y condimentos preparada por Adán Ávila, fundador del negocio con 20 más de años.

La bebida incluye ingredientes como jugo de tomate, apio, saladitos, camarones y carne seca. / Óscar Gómez