Las celebraciones religiosas en los templos continúan llevándose a cabo por internet para evitar riesgos de contagios por Covid-19, sin embargo, se espera la indicación y autorización de las autoridades de salud para retomar las actividades al interior con las medidas de seguridad sanitarias.
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El padre Agustín Partida Díaz Garza, encargado de la Capilla Santo Niño de Atocha, dijo que esperan la reunión de este miércoles del alcalde, Santos González Yescas, con miembros del Comité Municipal de Salud, en donde se emitirán acuerdos referentes a la “nueva normalidad” en diversos sectores de la sociedad, entre ellos, el ámbito religioso.
“Cuando se dé la apertura de los templos, el regreso será de manera progresiva ordenada y cuidadosa. Cada párroco verá la mejor manera de orientar a sus fieles para que no se aglomeren en alguna celebración, aunque todavía no estamos obligados a celebrar de manera presencial la misa de los domingos”, externó.
En este sentido, cabe destacar que la Secretaría de Salud de Sonora, estableció protocolos de seguridad para las celebraciones religiosas por el Covid-19, en el cual se indica que a raíz de la contingencia sanitaria se suspendieron las reuniones en las iglesias por reunir a un gran número de personas en espacios cerrados como son entornos que pueden favorecer la proliferación del virus.
Funcionarios de salud del estado han hecho hincapié que, para esta nueva realidad, una vez que se reanuden las actividades religiosas será necesario el reforzamiento de las medidas de prevención tales como la sana distancia, el lavado frecuente de manos y la desinfección de objetos y superficies que se encuentran en estos edificios.
También se resalta que las autoridades religiosas deberán recomendar a la población en riesgo presenciar o participar en la celebración por medio de plataformas digitales, se habilitará sólo el 50% o menos de la capacidad del sitio de culto, de manera que se garantice la sana distancia de 1.5 m entre los feligreses, evitar la distribución de hojas o panfletos y el saludo de mano, besos o abrazos, entre otras medidas que tienen como finalidad prevenir contagios del nuevo coronavirus.