Se preparan católicos para vivir la "Pasión de Cristo"

Es importante que no se olvide el verdadero sentido de la Semana Santa, que este año se verá afectada por la contingencia sanitaria del coronavirus

Gloria Negrete | Tribuna de San Luis

  · jueves 19 de marzo de 2020

El viacrucis viviente es una de las actividades que se desarrollan cada año durante la Semana Santa / Archivo | Tribuna de San Luis

La Semana Santa es una época del año en que las familias aprovechan para vacacionar, para pasar tiempo juntos. Sin embargo, es importante que no se olviden del verdadero sentido de esta celebración que es recordar y vivir la Pasión de Cristo, que este año se verá afectada por la contingencia sanitaria del coronavirus, destacó el padre, Agustín Partida Díaz Garza, encargado de la capilla “Santo Niño de Atocha”.

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¿Padre Agustín Partida, cuál diría usted que son los modernos fariseos de los cuales la Iglesia debe alejarse?

"Diría que los modernos fariseos son aquellos que hoy, en nuestros días, han asumido aquellas mismas actitudes de los Fariseos de los tiempos de Jesús como vigilar al otro no para aprender sino para encontrar algo que esté haciendo mal; sentirse mejor que los demás, compararse y juzgar al que vive mal; abusar de la propia autoridad y ser despiadado, despreciar y ser indiferente ante los problemas del prójimo"

Semana Santa se ha vuelto equivalente a vacaciones, fiestas, playa, destrampe ¿es así?

"Considero que es un tiempo para vacacionar, siempre y cuando se guarden las debidas proporciones y también se dedique tiempo para acudir a los templos y participar en la celebración de la Semana Santa en la que se recuerda la pasión de Cristo. Creo que ante una sociedad cada vez más secularizada para los católicos, éste es el único tiempo que se les ofrece a los esposos e hijos para descansar. Déjame decirte que, en comparación a otros días, la Semana Santa es una de las celebraciones en que más se acercan los fieles a la iglesia, incluyendo a los jóvenes, quienes se muestran interesados en participar en las actividades que se llevan a cabo".

Los 40 días de recogimiento moderno son ignorados por una sociedad cada vez más secular, ¿qué hacer ante eso?

"Evangelizar y catequizar, conociendo primero los lenguajes y nuevos lenguajes, y haciendo uso de los medios. Además es necesario tener coherencia de parte de todos los católicos"

¿El ayuno y abstinencia son mejor aprovechados por quienes venden pescados y mariscos que por los pescadores de almas?

"No conozco estadísticas, pero parece que sí. La abstinencia se ha trasladado al consumo de pescado y mariscos. La abstinencia de la comida tiene como fin, introducir en la existencia del hombre el equilibrio necesario, pero también el desprendimiento de las cosas materiales, de la actitud consumista"

¿La Iglesia debería hacer marketing (campañas publicitarias) para devolverle a esos días su tradicional sentido de luto y reflexión?

"Lo primero es evangelizar, catequizar, coherencia, esto nada lo puede suplir y debemos incorporar estas estrategias dentro de un plan evangelizador y de catequesis tanto dentro como fuera de los templos, utilizando, por qué no, los medios medios de comunicación tanto tradicionales como digitales"

Qué tan lejos ve a la Iglesia de las redes sociales: ¿imagina un Evangelio de You Tube, Twitter, Facebook o Instagram?

"Primero, se creó la dimensión digital en la Comisión Episcopal de Comunicación, para animar el uso de estas herramientas y medios en la evangelización. De las Diócesis el 73% cuentan con un medio impreso, ligado a una red social; 32 estaciones de radio por internet. El 100% cuentan con alguna red social en el siguiente orden: facebook, whatsApp, instagram, twitter, youtube) y el 83% tienen una página de internet”.

¿El coronavirus afectará los actos de esta Semana Santa?, ¿Este tipo de pandemias nos dicen algo a los creyentes?

"Considero que afectará la asistencia, la presencia. Estas pandemias como el coronavirus, nos hablan de la fragilidad del ser humano, de la oportunidad de vivir las obras de misericordia y de iluminar estas realidades del sufrimiento y la enfermedad con la palabra de Dios".