Tras dos años a cargo de las oficinas locales del Instituto Nacional de Migración (INM), el licenciado Álvaro Colosio presentó su renuncia al cargo como Delegado para dedicarse de tiempo completo a litigar como abogado.

Desde el pasado 31 de diciembre, Colosio habría presentado su renuncia voluntaria, pero fue hasta este pasado 15 de marzo cuando ésta le fue aceptada, por la misma carga de trabajo que el puesto federal demanda.

“Fue un lapso muy satisfactorio, el poder ver por nuestros connacionales y extranjeros en una situación tan vulnerable, pero es tiempo de regresar de lleno a mis actividades como abogado”, expresó don Álvaro Colosio, quien a partir de la entrega de su renuncia se encuentra atendiendo desde su propio despacho.

A don Álvaro Colosio le tocó atender dos de los fenómenos migratorias más fuertes de los últimos años en esta frontera, siendo éstos el grupo de haitianos que por meses tuvieron presencia en la ciudad y las caravanas migrantes, que a la fecha se encuentran llegando a la franja fronteriza.

Aunque aún no se define el relevo del priista al cargo federal, en las oficinas hay un encargado de despacho quien funge como tal, hasta que el mismo orden federal tome protesta a quien llevará las riendas de la dependencia en atención a los repatriados por México.

Extraoficial

De manera extraoficial se informó que será el sanluisino Fausto Ocho Montaño, quien a partir de los próximos días será el nuevo delegado del Instituto