La tradición de visitar a los fieles difuntos el día dos de noviembre, sigue vigente en San Luis Río Colorado, al ver la gran cantidad de personas que acuden a los panteones a celebrar el Día de Muertos.
Gran parte de las personas que se vieron en el Panteón Municipal número uno, fueron en familia quienes a su vez se dividían para visitar las tumbas donde descansan los restos de otros familiares y amigos en el mismo camposanto.
A las afueras de este panteón que se ubica en avenida Revolución y Calle 40, se pudo observar un gran número de puestos en donde se vendían alimentos, agua, antojitos y obviamente flores, veladoras y coronas, para adornar las tumbas.
Al interior, el panteón se convirtió en el centro de la celebración, donde con música, cantos y ofrendas las familias reían y lloraban al recordar a su gente y los momentos que pasaron en vida.
Ofrecen misa a los fieles difuntos
En punto de las 12:00 horas de este dos de noviembre, quienes practican la religión católica se dieron cita en la Cruz del Perdón que se ubica casi al centro de este panteón, para presenciar la misa a los fieles difuntos.
El alcalde Santos González Yescas, su esposa Yolanda Orozco, y funcionarios de la actual administración como síndica procuradora, Verónica Patricia Acosta Bracamontes, director de Seguridad Pública, Gerardo Camacho Ramírez, director de Salud Pública, Pedro Torres Rivera y director de Obras y Servicios Públicos, Luis Lara estuvieron presentes en dicha ceremonia.
Siguiente a eso el alcalde y su comitiva, acudió a una comida que se les ofreció a los trabajadores de los panteones, donde compartió con ellos unos breves momentos.
Hay un espacio para bomberos
En este panteón, se guardan los restos de elementos veteranos pioneros del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de San Luis Río Colorado, por lo que las tumbas están adornadas con cascos y mangueras para hacer referencia a su profesión.
Son “Kalimán”, Sobarzo, Cáñez, Andrade, Gerardo y Espinoza, algunos de los que se pueden encontrar aquí, así como también al comandante Mario González, recuerdan Marco Antonio González y Gerardo Gerardo Villegas, quienes también son bomberos y gran parte de los que están sepultados en ese espacio son sus familiares o fueron compañeros de trabajo.
En el caso del comandante Mario González, los bomberos recordaron que murió en cumplimiento de su deber, cuando acudió a una conocida ciudad de Estados Unidos por un donativo para la corporación, pero la explosión que hizo un tanque de oxígeno al caer, le provocaron heridas de las cuales no pudo sobrevivir.
Marco Antonio González llamó a la ciudadanía para que cuiden este espacio, ya que dijo, fueron personas que en vida se dedicaron a cuidar de los sanluisinos por lo que merecen respeto. Este lugar comentó ha sido vandalizado en varias ocasiones, rompiéndoles las lápidas y las bancas que han creado con madera y mangueras
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