En el área de urgencias de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de esta ciudad se atienden, en promedio, entre 1 y 2 personas por mordedura de perros cada quince días; la recomendación es que ante este tipo de situaciones se acuda de inmediato a consulta médica.
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El director de la UMF, doctor Óscar Castro Guevara, señaló que el protocolo de atención para estos pacientes al llegar al servicio de urgencias, es realizarles el aseo de la parte del cuerpo afectada por la mordedura del animal, en este caso, del perro.
Posteriormente, el personal de salud hace un interrogatorio al paciente para ver si conocía al perro que lo afectó, con la finalidad de que cuestionen al propietario si el animal cuenta con las vacunas y si periódicamente se someten a baños y otras medidas de higiene.
El doctor Castro destacó que en caso de que el perro sea desconocido y no se haya localizado luego del ataque el humano, la persona corre más riesgos debido a que no se tiene el antecedente del animal que lo agredió. Agregó que es importante localizar al perro que mordió para mantenerlo bajo vigilancia.
Óscar Castro indicó que aplicar la vacuna antirrábica al paciente dependerá de diversos factores entre los que mencionó: si se logra localizar o no al animal, sintomatología de rabia, tipo de herida, edad del paciente y también se debe tomar en cuenta si la persona agredida tiene alguna comorbilidad como diabetes, hipertensión arterial, inmunodepresión, entre otros.
Para prevenir y evitar la rabia en los animales, la Secretaría de Salud de Sonora hizo un llamado a la tenencia responsable de mascotas, evitando que estas deambulen libremente, ya que pueden tener contacto con animales silvestres potencialmente Infectados; y aplicarles la vacuna contra la rabia al primer mes de edad, revacunar a los tres meses y, posteriormente, cada año por el resto de su vida.
A través de la Secretaría de Salud se informó que la vacuna antirrábica se encuentra disponible en las campañas de Atención Canina y Felina en las unidades de salud, donde se programa la inmunización de mascotas.
En caso de que una persona sea agredida, mordida o haya tenido contacto con la saliva de un animal doméstico o salvaje, la Secretaría de Salud recomendó acudir a una unidad de salud más cercana para recibir atención médica y valoración. De igual forma, exhortó a la población a no manipular murciélagos, zorros, zorrillos o coyotes, a fin de limitar el riesgo de transmisión de esta enfermedad mortal.