Reprueban agresión de policía a ilegales

La supuesta agresión física y sexual a menores migrantes bajo custodia de la Patrulla Fronteriza del Sector de Yuma apareció en medios internacionales

Luis Carlos Bravo

  · jueves 11 de julio de 2019

Los menores manifestaron haber recibido agresiones sexuales y físicas / Archivo

Ante las acusaciones que un grupo de migrantes menores de edad hicieran a un medio de comunicación estadounidense sobre un casos de abuso físico y sexual en etapa de toqueteo por parte de elementos de la Patrulla Fronteriza en Yuma, Arizona, el Comité de Bien Estar de San Luis, Arizona, reprobó públicamente cualquier tipo de agresiones en contra de la comunidad flotante en espera de ayuda humanitaria.

Martina López, quien es una de las administradoras de la agrupación civil que colabora como refugio para migrantes en cita al juez federal tras solicitudes de visa humanitaria, dijo que además de buscar la manera de que estas cosas no ocurran, esto debe significar un parteaguas para los indocumentados en su paso por Estados Unidos.

Marco Antonio Luna Espíndola, regidor integrante de la comisión de Seguridad Pública al interior del Cabildo. / Cortesía

“En general, debe existir más protección y vigilancia para los migrantes desde que llegan a este país hasta cuando permanecen en los centros de detención, pues recordemos que son un sector muy vulnerable de la sociedad, al que debemos ayudar”, expresó.

SOBRE LAS AGRESIONES

Fue la tarde del pasado martes cuando un medio de comunicación de proyección internacional compartió que al menos 12 menores de edad en estatus de migrantes, manifestaron haber sido agredidos físicamente en custodia de la Patrulla Fronteriza del Sector de Yuma, Arizona, algunos incluso, fueron tocados de sus partes íntimas, según la declaración.

Actualmente, la organización federal es investigada por el ente responsable para dar seguimiento a las denuncias vertidas públicamente.

AGRESIÓN SEXUAL

En la declaración aparece el caso de una menor de 16 años que asegura fue tocada se sus partes íntimas por un agente de la Patrulla Fronteriza