Una dura realidad es la que sufren cientos de familias a la par de la contingencia sanitaria, siendo la violencia en el hogar la constante en los hogares de San Luis Río Colorado, con un acumulado que asciende hasta los 6 mil 24 casos registrados en el Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo, Coordinación e inteligencia (C5i).
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Así lo dio a conocer Ricardo Sarabia, coordinador del organismo estatal, afirmando que las incidencias se mantuvieron altas hasta septiembre y octubre, lapso en el que se “cayó” levemente a la par de un aumento en la movilidad poblacional y reducción de restricciones sanitarias en distintos sectores; recordando con esto que, de manera indirecta, situaciones como la pérdida de empleo, crisis económica, aislamiento social y limitación en insumos o alimentos fueron influenciaron en los números rojos de esta ciudad fronteriza.
En ese sentido, previo al inicio de la crisis epidemiológica se registraron 514 y 528 reportes por violencia intrafamiliar durante enero y febrero, respectivamente; para después dar paso a 594 en marzo.
Posteriormente, el C5i atendió mediante el número de emergencias (911) 554 casos en abril, 639 en mayo y 628 en junio.
Cabe mencionar que julio fue el mes con el mayor número de incidencias con 678 casos; cuando en ese entonces los problemas sociales por el Covid-19 iban a la par de una mayor ocupación hospitalaria.
INICIA DESCENSO
Al iniciar agosto, los números comenzaron a descender, quedando en 634 reportes por violencia en el hogar, seguido de 544 acontecidos durante septiembre y 484 en octubre.
Así, desde el inicio de noviembre hasta el cierre de edición, el ente estatal ha tomado nota de 227 casos violentos en familias de este municipio, con lo que se acumulan los más de 6 mil reportes.
Al respecto, la socióloga sanluisina Aidé Patiño dijo que es relevante esta disminución en la estadística; sin embargo, mencionó que eso no significa que el problema está pronto a terminar, ya que tanto agresores como víctimas requieren de un seguimiento con terapia psicológica, además de que necesitan atención en cuanto a educación de la prevención de la violencia en casa.
“El hecho de estar encerrado genera estrés. El ser humano es social y no estamos acostumbrados a estar solos, aún con la tecnología y las redes sociales, no es lo mismo”, dijo y agregó que la violencia es un problema que no se detendrá, sobre todo por el consumo de drogas y alcohol, que es un comportamiento que se deriva de ciertos patrones de conducta aprendidos en la infancia.