Las mascotas, especialmente los perros y gatos, entran en pánico al escuchar cohetes y sufren de taquicardia que puede provocarles un infarto o derrame cerebral, por eso es importante protegerlos de esos ruidos tan intensos.
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En esta época del año, algunas personas acostumbran a quemar fuegos artificiales, lo que genera una afectación a los animales debido a que perciben los sonidos hasta 100 veces más intenso que los humanos.
Así lo expresó Guadalupe Del Toro, médico veterinariozootecnista, quien sugirió a los dueños de perros y gatos que previo a las 00:00 horas del 25 de diciembre y 1 de enero, resguarden a sus mascotas para evitar que se asusten por el estruendo de los cohetes y salgan despavoridos a la calle donde pueden ser atropellados.
“Debemos asegurar bien los cercos de nuestras casas para prevenir que salgan a la calle pues al tratar de huir del ruido de los cohetes, corren el riesgo de ser atropellados o extraviarse como ya ha sucedido en navidades anteriores”, refirió.
El sonido que emiten los juegos pirotécnicos afecta física y mentalmente a los animales, sobre todo a los perros que al oír los fuertes ruidos pueden presentar temblores, falta de aire, taquicardia, náuseas, desorientación, aturdimiento, pérdida de control, miedo y hasta la muerte.
Lo ideal es mantener a las mascotas dentro de las casas mientras pasa el momento de mayor quema de cohetes. “Debemos tenerlos en una habitación y de, ser posible, ponerles música relajante y darles unas gotas naturales que los ayuden a mantenerse tranquilos”, externó.
Guadalupe Del Toro exhortó a los sanluisinos a no quemar cohetes este fin de año, ya que afecta no solo a los animales y a las personas autistas, sino que también contamina el medio ambiente.