Los panteones uno y dos de la ciudad, prácticamente están saturados y les queda poco espacio para albergar a nuevos difuntos.
La síndico Procurador Verónica Acosta Bracamontes, informó que, el panteón #1 (ubicado en la avenida Revolución y calle 40) está lleno, desde el 2019, son 20 hectáreas de superficie.
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“Hicimos un levantamiento, vimos que había espacios libres, esos espacios tienen derechos, por lo regular, las tumbas aledañas y no hay venta de terrenos a personas que quieran que su familiar quede en ese sitio”.
Agregó que, si se sigue sepultando en el panteón #1, es porque se hace sobre otro cuerpo que ya está ahí, o porque ya tenían espacio asignado.
Expresó que una opción viable para sepultar a los seres queridos en el panteón #1, son los nichos, que solamente se han ocupado cinco o seis, pero hay en total 200 espacios, cada uno es para cuatro o cinco urnas; ya se habla más de ellos y ya hay contratos para algunos más.
Indicó que el precio del contrato por cada nicho es de 8 mil 850 pesos, es en un solo pago, y es perpetuo el espacio.
Comentó que, originalmente, el costo era de 23 mil pesos, sin embargo, se hizo un estudio socioeconómico y de mercado, y la comisión de Hacienda del cabildo decidió reducir su costo a una tercera parte.
El panteón #2
El segundo cementerio, ubicado en la colonia Topahue, tiene escasos 20 años en funciones, sin embargo, prácticamente ya se ha saturado, porque en ese sitio se sepultaron a la mayoría de las personas que perdieron la vida por Covid-19.
“En un panteón de cinco hectáreas, está casi lleno, se sobre pobló, debido a que ahí hicimos en área Covid-19, por eso se saturó más pronto de lo pensado; ahorita probablemente haya espacios para unos 50 a 60 cuerpos”.
Dijo que la parte de atrás del mismo, estuvo destinada para quienes fallecieron de esa enfermedad, y eso que no se contó a los sepultaron sobre otros difuntos que ya estaban ahí.
Comentó que la desventaja que se tiene, es que no hay recursos para hacer una barda que lo delimite, aparte, se tenía pensado adquirir los terrenos que estaban aledaños al camposanto, pero el ejido La Grullita ya los había vendido.
El panteón #3
El panteón que estará ubicado en el ejido Islita, todavía no entra en funciones, aunque no tarda en comenzar sus operaciones, es posible que se antes de finalizar el año.
“Esos terrenos ya está legalmente adquirido, ya es propiedad del ayuntamiento, es adquirido con donación de seis hectáreas y se compraron 21, hacen un total de 27 hectáreas, el más grande del municipio”.
Mencionó que hay un proyecto para ese cementerio, ya que hay mucha demanda de nichos y de espacios tipo americano, se extendieron dichas áreas.
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“En el área tipo americano, caben 4 mil 800 tumbas, con lo que rebasaríamos por mucho el área que tenemos en el panteón #2; lo demás es área común”.
El área de nichos está destinada para albergar a 900 de ellos, lo que sería una cantidad muy superior al de la Revolución y 40, lo demás es para tumbas normales”.