La tarde de ayer entró en vigor la orden de permanencia que llama a todos los residentes de Arizona a permanecer en el interior de su casa, luego de que hace unos días el gobernador Doug Ducey declaró ser un tema necesario para evitar más contagios de coronavirus entre la comunidad.
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Ayer, Ducey se refirió a su declaración como una orden de “quedarse en casa, mantenerse sano, mantenerse conectado”, y dijo que “promueve el distanciamiento físico y al mismo tiempo fomenta la conexión social”, tras agregar que dicha orden permanecerá vigente hasta el 30 de abril o bien, podría extenderse de agudizarse la pandemia en el estado.
La orden del gobernador establece que los residentes de Arizona deben limitar su tiempo fuera de casa, excepto cuando estén involucrados en “actividades esenciales”, trabajo o voluntariado en “funciones esenciales”, por ejemplo, establecimientos de atención médica y operaciones de salud pública, incluidos hospitales y entidades de salud pública.
De igual forma, incluye las operaciones de servicios humanos, incluidas las que brindan servicios para personas mayores, personas con discapacidades del desarrollo, niños de crianza y adopción y personas sin hogar; así como socorristas, operadores del 911, personal de protección infantil, proveedores de asistencia social y más.
Sobre posibles multas o sanciones verbales para quienes se sorprendan en la calle sin motivos esenciales, no se ha dado información.
EN NÚMEROS
En el estado de Arizona, se han confirmado alrededor de 1 mil 160 casos positivos, de los que han reportado una veintena de defunciones. Particularmente en el condado de Yuma, (que incluye a San Luis, Arizona), suman a 12 casos, según las autoridades de salud de Estados Unidos.
