“Mi guitarra me acompaña a todos lados": José Javier deleita a los sanluisinos con su música

Cuando era niño se encontró una guitarra en la basura y aprendió a tocarla y ahora vive de las propinas que le dan al oírlo tocar y cantar

Gloria Negrete / Tribuna de San Luis

  · jueves 9 de mayo de 2024

José Javier Sandoval recorre las calles del primer cuadro de la ciudad tocado la guitarra. Foto: Gloria Negrete / Tribuna de San Luis

Cuando era niño, José Javier Sandoval Solís se encontró una guitarra entre un montón de basura, sin imaginar que este instrumento musical lo acompañaría durante el resto de su vida y le permitiría obtener el sustento económico.

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El mural de Lefty SM trasciende el arte callejero; es un testimonio conmovedor de un talento perdurable y un legado imborrable en la historia de la música mexicana. Foto: Flor Bolaños / Tribuna de San Luis

El señor José Javier de 68 años de edad, contó que nació en el estado de Nayarit, pero desde que era niño reside en San Luis Río Colorado a donde llegó de la mano de su mamá quien lamentablemente falleció cuando él apenas entraba a la adolescencia.

Debido a que su madre murió, Javier se vio obligado a trabajar siendo todavía un niño, pues en ese tiempo estaba en la escuela primaria. “Desde niño he trabajado, he boleado zapatos, pizcado algodón, he vendido chicles y periódicos, también. La vida para mí no ha sido nada fácil. Me salí de mi casa cuando era niño y todo este tiempo he vivido solo, en la calle. Un tiempo tuve un lote, pero ya no lo tengo. Ahora duermo en la calle”.

José Javier comentó que se involucró en la música debido a que cuando era niño acudía a tiraderos de basura en busca de botes de aluminio para venderlos y obtener dinero para comer.

“Un día vi que entre el montón de basura estaba una guitarra tirada y la junté, me la llevé. En ese momento no sabía bien qué iba a hacer con ella, pero después se me ocurrió aprender a tocarla y aprendí viendo a otros, escuchando”.

Fue así que José Javier se dedica a recorrer las calles del primer cuadro de la ciudad para deleitar a los transeúntes con su música y voz, entonando canciones cristianas pues desde hace varios está congregado a servir a Dios.

Todos los días, el músico urbano empieza a trabajar a las 10:00 de la mañana y se retira del centro alrededor de las 5:00 de la tarde, ya que antes de que se meta el sol se dedica a buscar un lugar en donde pasar la noche.

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“Mi guitarra me acompaña a todos lados. Vivo de las propinas que la gente me da al oírme cantar y tocar. Es lo que hago ahora… Sí, me hubiera gustado seguir estudiando para ser alguien en la vida y vivir mejor…Nomás termine sexto de primaria”, expresó.

Para finalizar, José Javier dijo que cuando asiste al templo cristiano platica con los jóvenes para aconsejarles que estudien, que se superen y que se mantengan cerca de su familia y de Dios.