Tras una semana de haber sido nombrado por el señor Obispo José Isidro III como el nuevo párroco de la capilla Santo Niño de Atocha, ubicada en la calle Villa de Coronado y Paseo Santa Fe (avenida Libertad B entre la calle 49 y 50), el padre Agustín Partida se encuentra preparando un esquema de trabajo en el que plantea llevar la eucaristía y el mensaje de paz a las calles de los distintos fraccionamientos de ese sector del municipio.
Así lo manifestó, compartiendo además que será este domingo 8 de septiembre que dará inicio al programa de misas para su nueva comunidad. “Tendremos un horario para la homilía en Capilla, siendo este a las 09:30 de la mañana”, compartiendo además que a partir del martes 10 de este mes dará inicio a las misas entre semana. “Serán a partir de las 06:30 de la tarde, de martes a viernes, a excepción del jueves en el que se harán a partir de las 05:30 pm, para a las 06:00 pm iniciar la Hora Santa y a las 07:00 pm realizar el taller denominado Oración y Vida”.
A su vez, dijo que será hasta el próximo domingo 15 de septiembre que se sumará otra celebración a las 12:00 horas, además de que se hará la primera eucaristía en la calle a las 11:00 horas en las inmediaciones del Fraccionamiento Chula Vista III, el cual es uno de sus objetivos para dar a conocer el amor de Dios en medio de una población con necesidades y problemas de inseguridad.
“También llevaremos a cabo una misa en la entrada del fraccionamiento Joyas del Parque, en punto de las 06:00 p.m.”.
NUEVOS OBJETIVOS
El entrevistado también compartió que, como parte del nuevo proyecto que se iniciará en Santo Niño de Atocha, será asentar los centros de evangelización, tanto en la capilla como en los fraccionamientos antes mencionados. “Se tendrá catecismo en esos lugares, desde los seis años en adelante, como preparación para los sacramentos y catequesis para adultos pre sacramentales y post sacramentales”, señalando que los catecismos infantiles comenzarán este 8 de septiembre a las 10:30 de la mañana en la misma capilla.
A la vez, externó que uno de los retos es construir una comunidad desde el inicio. “Todos formamos el cuerpo de Cristo, todos somos importantes. A mí me toca solo ser quien dirija, pero necesito de todos los demás. También, habrá que buscar otros terrenos para construir centros de culto y evangelización cercanos a la gente, para involucrarlos y que puedan participar”.