En las instituciones educativas se tienen establecidas acciones de prevención y detección de bullying para evitar que se presenten casos y desenlaces perjudiciales en los niños, niñas y adolescentes que son acosados.
Jefes de sector y directivos de escuelas indicaron que en los planteles educativos tienen establecidos protocolos para evitar acoso escolar y aseguraron que al momento de detectar estas situaciones no se dejan pasar ni se minimizan; al contrario, se actúa de inmediato para detener el maltrato físico, verbal y psicológico que esté ejerciendo un alumno en contra de un compañero de escuela, a fin de prevenir que avance y termine en una tragedia como sucedió recientemente en Mexicali en donde un estudiante de primaria llamado Damián murió víctima de bullying que ya se habían reportado ante directivos y docentes, pero no hicieron nada al respecto.
En este sentido, la maestra Leticia Patiño Nevarez, directora de la Escuela Secundaria General número Uno, Capitán Carlos G. Calles, hizo hincapié, en cuanto al tema de bullying, que lo primero es trabajar en prevención y otorgar apoyo familiar y apoyo para administrar la inteligencia emocional de los alumnos.
Agregó que los docentes deben detener el problema, registrar signos y casos de violencia en su bitácora para posteriormente valorar y decidir su actuación. Además, deben documentar su estrategia y notificar el caso de acoso al director.
La maestra Leticia Patiño dijo que se habla con las posibles víctimas para trabajar habilidades sociales y emocionales, se actúa con prudencia, no se le expone ante sus compañeros y se le hace sentir confiado.
En el caso del agresor, la directora refirió que se trabaja con su empatía, habilidades sociales y emocionales, se les explica claramente los comportamientos intolerables y si es necesario se hacen las gestiones para que reciba terapia para el control de la impulsividad y conducta agresiva.
En el caso de los padres de la víctima se les expone el problema y se solicita que observen posibles cambios, que hablen con su hijo para que les explique lo que sucede, es decir, que enfrenten el problema y no utilicen la violencia pues es importante que hagan sentir a su hijo seguro y confiado.
En cuanto a los padres del alumno agresor, la directora comentó que se habla directamente con ellos de lo que está pasando, se les alienta a hablar con su hijo para que el menor sepa que cuenta con su ayuda para enfrentar el problema y orienten al adolescente a no ejercer la agresividad ni la venganza.
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Por su parte, el maestro Agustín Buitimea, jefe de sector educativo número 10 de primarias federales, manifestó que, en las 49 escuelas a su cargo, los profesores están muy atentos a este tipo de casos y, de ser detectados, se da puntual seguimiento para evitar que avancen.
“Cuando se detectan situaciones de bullying seguimos los protocolos que marca la SEC, aplicando una encuesta a los niños, inmediatamente se separa al agresor de la víctima y se da atención a ambos y, de ser necesario, se les canaliza a instancias externas para que reciban apoyo”.
Concluyó que en las escuelas se lleva a cabo el Programa Nacional de Convivencia Escolar, el cual tiene como objetivo favorecer el desarrollo de una buena convivencia escolar y de ambientes escolares pacíficos.
Sobre el bullying
De acuerdo a lo informado por la Secretaría de Salud de Sonora el acoso escolar (bullying) es la exposición repetida a acciones negativas, perpetradas por uno o más estudiantes hacia sus compañeros, y se puede presentar de manera física, verbal, psicológica y cibernética.
Personal de esta dependencia estatal informó que para identificar a las personas que están sufriendo algún tipo de acoso escolar, las principales señales de alarma son: faltar a clases frecuentemente o poner cualquier excusa para no asistir al plantel para no encontrarse con la persona acosadora o agresora.
Los cambios de comportamiento, añadió, también son una señal que hay que tener en cuenta, así como bajas calificaciones; pérdida de amigos o deseos de evitar situaciones sociales; cambios en los hábitos alimentarios, disminución de la autoestima, comportamiento autodestructivo y pensamientos suicidas.
Por lo anterior, la Secretaría de Salud de Sonora recordó a la población que buscar ayuda es fundamental para evitar desenlaces perjudiciales en alumnos que son acosados, por esto puso a disposición la línea de emergencia 9-1-1, donde especialistas en salud mental asesora a este tipo de problemas, realizando la primera intervención, para posteriormente acudir con los profesionales de manera presencial.