En esta ciudad existen instituciones que promueven esta lengua con la finalidad de eliminar las barreras de comunicación de personas sordas y tener una sociedad más inclusiva
El 10 de junio se celebra el Día Internacional de la Lengua de Señas Mexicana (LSM), con el objetivo de promover la concientización sobre su importancia para la plena realización de los derechos humanos de las personas sordas.
Daniela Aranda maestra del Centro Inclusivo de Regularizaciones, Asesorías y Talleres (CIRAT) de esta ciudad, consideró que es necesario seguir trabajando en el impulso de la enseñanza y el aprendizaje de la LSM, pues esto permite eliminar las barreras de comunicación del entorno que tienen las personas sordas y contribuir a tener una sociedad más inclusiva.
Comentó que a través del CIRAT desde hace 6 años se imparten cursos de la Lengua de Señas Mexicana y aunque cada vez son más las personas sordas y no sordas las que se interesan por aprenderla, consideró que todavía falta mucho por hacer, pues la mayoría de la población en México desconoce esta forma de comunicación.
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“Nosotros seguimos en la lucha para que más personas se interesen por aprender la Lengua de Señas Mexicana, con la finalidad de reducir las barreras de accesibilidad de información. La lengua de señas es un derecho de las personas sordas, es su lengua natural y es la forma en que ellos entablan una conversación. Es muy importante que cada vez más espacios tengan a una persona que domine la lengua de señas mexicana”.
Sobre el Día Nacional de la Lengua de Señas Mexicana
Información emitida por el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad, cada año desde el 10 de junio de 2005, celebramos en México el Día Nacional de la Lengua de Señas Mexicana (LSM), la cual es reconocida oficialmente como una lengua nacional y forma parte del patrimonio lingüístico con que cuenta la nación mexicana.
La LSM, es la lengua de la comunidad de sordos en México, y consiste en una serie de signos gestuales articulados con las manos y acompañados de expresiones faciales, mirada intencional y movimiento corporal, dotados de función lingüística, forma parte del patrimonio lingüístico de dicha comunidad y es tan rica y compleja en gramática y vocabulario como cualquier lengua oral.
Existen algunas variaciones en la LSM de acuerdo con las regiones geográficas del país, además es muy diferente al español por ejemplo en el orden de las palabras y en el uso de los verbos.
