Como parte de los ajustes realizados por parte de la Diócesis de Mexicali en San Luis Río Colorado, se implementaron cambios en dirigentes espirituales de distintas parroquias, capillas y rectorías, tal como en el caso del padre Agustín Partida, quien después de siete años de estar al frente de la Rectoría Mártires Mexicanos, se enfrenta a una serie de retos con la nueva misión en la comunidad religiosa de Santo Niño de Atocha, ubicada en la calle Villa de Coronado y Paseo Santa Fe.
“Esta comunidad dependía de la parroquia de San Luis Gonzaga, pero a partir de este cambio se inicia una nueva a mi cargo, en la que queremos una mayor presencia de Dios y sus sacramentos en estos 14 fraccionamientos y los que se están construyendo, así como en Las Adelitas, para poder atender a esta población espiritualmente”.
“Aquí hay una problemática muy grande, relacionada con la delincuencia e inseguridad. Esperamos atender más cercanamente los valores y virtudes para que esta gente pueda sentir a Dios más cerca”, dijo el reconocido sacerdote.
Además, indicó que de recibir el apoyo de los feligreses llevaría la eucaristía a las calles de los distintos fraccionamientos del sector, oficiando misas al aire libre.
El padre, ante invitados que le han acompañado desde su arribo a esta ciudad, compartió confiar en Dios y su providencia para ayudar a esa población.