Una familia proveniente de Michoacán se albergó por algunos días en el Parque Benito Juárez, en la búsqueda del asilo político en Estados Unidos, donde instalaron su casa de campaña para poder pernoctar.

Marta, una de las integrantes de esta familia comentó que no habían sido removidos del parque porque estaban durmiendo en las bancas o en el pasto, pero que el día que instalaron la casa de campaña, elementos de la Policía Municipal, les pidieron que se retiraran.

Comentó que los policías los guiaron hacia uno de los albergues de la ciudad, para que pudieran estar más cómodos y con mayor seguridad, sobre todo porque con ellos viajan menores de 18 años. “Estuvimos algunos días durmiendo aquí, pero los policías nos mandaron a un albergue para que ahí durmieramos, pero en las tardes nos venimos al parque”.

Marta cuenta que huyeron de Michoacán, por la ola de violencia que aqueja a aquel estado, pero sobre todo a su comunidad y que en esta ciudad están esperando ser escuchados por las autoridades de Estados Unidos. “Estamos aquí porque queremos irnos a Estados Unidos, tenemos miedo de regresar a nuestro pueblo porque está muy feo”.

Comenta que se ubican siempre frente a los estacionamientos de la avenida Hidalgo, pues su esposo pide “un chance” a los lavacarros para que lo dejen trabajar por ellos y reunir algunos pesos para comprar alimento, sobre todo para sus hijos, pero que ella también desea trabajar.

Marta está esperando que le llamen “del empaque”, donde ya fue a dejar sus papeles, en la búsqueda de tener un ingreso seguro para ella y su familia y poder rentar un lugar para brindarle un techo a sus hijos.

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Como esta familia, se encuentran otras dos más en el Parque Benito Juárez, el cual se ha convertido en un albergue para migrantes y para personas que viven en situación de calle, así como para otras personas que acuden al lugar.