La Secretaría de Salud recomienda la incineración, aunque los cuerpos pueden ser enterrados en servicios cortos Tras tener Sonora una alta tasa de mortalidad por Covid-19, las autoridades de la Secretaría de Salud definieron el mecanismo a través del que se dispondrá de los cadáveres contagiados con éste, aunque no es una regla, lo recomendable es la incineración o inhumación inmediata.
RECIBE NOTICIAS DIARIAS EN TU CELULAR, ÚNETE A NUESTRO CANAL DE TELEGRAM AQUÍ
De acuerdo con la “Guía de Manejo de Cadáveres por Covid-19”, diseñada por la Secretaría de Salud de Sonora, los restos deberán ser trasladados en una bolsa (desinfectada) del hospital a la funeraria. Ya en el establecimiento, la sugerencia es la cremación, pues las cenizas no suponen un riesgo, no obstante será cuestión de elección cultural de la familia y de disposición de recursos.
Según declaró José Luis Tovar Tovar, jefe de la Unidad de Control contra Riesgos Sanitarios, el entierro deberá realizarse en condiciones muy cuidadosas y estará prohibido el contacto de los familiares con el cadáver. “Lo que se sugiere a los responsables de funerarias es tomar una fotografía del cuerpo en la bolsa, en el hospital, a manera de que sirva para la identificación familiar, incluso el ataúd no será expuesto, en caso de que la familia desee verlo, serán colocados a una distancia para que no haya algún tipo de contacto ni con la caja ni con los restos”.
TRANSPORTE
Tovar Tovar comentó que el cuerpo será inhumado o cremado inmediatamente al llegar a funeraria, apenas lo que tarden en realizarse los trámites del registro del deceso ante el Registro Civil y otras entidades. “Cada funeraria deberá contar con todo el equipo necesario para que del hospital entreguen el cuerpo en bolsa desinfectada, se usarían cajas de cartón para el traslado y posterior colocación en el ataúd, en caso de que el familiar decida inhumar, pero aquí lo esencial es no tener contacto con los restos”. Incluso están prohibidas las intervenciones de tanatopraxia o tanatoestética, es decir no se hará preparación (embalsamiento) ni manejo estético para su presentación, pues no la habrá.
El funcionario explicó que las ceremonias funerarias donde hubo cremación, la familia podrá llevarse los restos y celebrar actos litúrgicos y serán las autoridades eclesiásticas quienes los obliguen a realizar un servicio de hasta diez personas, solo familiares directos.
Agregó que la información ya fue remitida a las funerarias a efecto de que cumplan con estas reglas para los servicios fúnebres, así como otras en torno al manejo del cuerpo.