El aumento que se anunció recientemente al salario mínimo de 15 por ciento es bueno hasta cierto punto, pero lo que debió ser gradual, debido a las condiciones de las empresas en este momento por la pandemia.
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El dirigente local de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Erick Merino Payán, informó que el incremento del salario que anunció el gobierno federal hace unos días, debió ser gradual.
“La Coparmex a lo largo de su historia siempre ha pugnado por el aumento del salario mínimo, pero lo que pedíamos era otro esquema, más gradual; desde el 2016 hemos hablado de que el salario mínimo cumpla con la línea del bienestar que maneja el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval)”.
Agregó que el año pasado coincidió con el gobierno federal en tiempo, forma y monto del incremento, pero ahora se pedía que fuera una estructura distinta, por la situación que atraviesan las empresas.
Recordó que un millón de compañías en México se encuentran cerradas, y en estos momentos se convertiría en un costo elevado y con menos venta e ingresos, debido a la pandemia.
Dijo que en esta ocasión se da un aumento del 15 por ciento, y se pedía una participación del gobierno federal.
“Qué mejor forma que el gobierno participara en ese incremento con un subsidio, que directamente llegara a los bolsillos de los trabajadores y que fuera algo parejo para ellos; por supuesto que las empresas participaran con ese incremento, pero no fue así”.
Comentó que es complicado de creer que las empresas estén cerrando, se carguen costos, y que tengamos que llevar solos con este tema.
Mencionó que lo único que crea es informalidad, porque una empresa que tenga una plantilla de 20 o 30 empleados, que se le incremente 15 por ciento el costo teniendo menos ventas y menos ingresos, por eso se quería que fuera gradual.
Consideró que una evolución agregada del 10 por ciento (4 por ciento de fijación por encima de la inflación esperada más un Monto Independiente de Recuperación (MIR) de 7.39 pesos) era un esfuerzo destacado por parte de las empresas que nos permitiría seguir avanzando hacia la línea de bienestar familiar.
Manifestó que, a pesar de esto, el organismo empresarial seguirá con el impulso del aumento al salario mínimo, porque cree que es necesario.
El aumento al salario mínimo debió ser gradual, debido a la situación que guardan las empresas hoy en día por la pandemia del Covid-19, sin ingresos ni ventas; en San Luis quedó en 213 pesos.
