Con el afán de apoyar a la comunidad en estos momentos de crisis sanitaria, un grupo de sanluisinos se dieron a la tarea de conjuntar esfuerzos y voluntades para confeccionar 12 mil cubrebocas que están distribuyendo, sin costo, entre quienes los requieren.
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Isela Ayala Cota platicó que el proyecto de elaboración de dichos insumos surgió por iniciativa de la doctora Mayra Elizabeth Guerrero Guzmán, originaria de esta ciudad, pero radicada actualmente en Estados Unidos.
Fue a principios de marzo cuando Mayra Elizabeth Guerrero contactó a un grupo de amigas de este municipio ante quienes manifestó su preocupación por la difícil situación que se aproximaba por la pandemia de Covid-19, pues ella lo estaba viviendo ya en Estados Unidos como profesional de la salud.
Isela Ayala contó que la doctora Guerrero propuso a un grupo de amigas hacer algo por su comunidad y una de estas opciones era fabricar cubrebocas de tela, reutilizables, para distribuirlos gratis en la localidad, como una medida de prevenir los contagios del nuevo coronavirus.
De inmediato se organizaron, empezaron a hacer aportaciones económicas entre ellas para comprar los materiales para poner manos a la obra y al poco tiempo se sumaron a la iniciativa un mayor número de personas entre amas de casa, empresarios, comerciantes, comunicadores, alumnos de enfermería, profesionistas y otros más que mostraron interés por ayudar a la sociedad.
MÁS DE 100 INVOLUCRADOS
Isela Ayala dijo que son alrededor de 100 personas las involucradas en este noble proyecto en el cual se han distribuido bajo la coordinación de Elizabeth Flores, aproximadamente 10 mil cubrebocas de un total de 12 mil que esperan entregar.
Estos insumos se han entregado a empleados y clientes de diversas empresas y dependencias públicas, así como a los residentes de colonias que han sido visitadas por el grupo de voluntarios que participan, quienes tocan las puertas de las casas para llevar este apoyo a las familias e invitar a sus integrantes a utilizarlos.
Los cubrebocas fueron fabricados siguiendo los protocolos establecidos por expertos, utilizando tela pellón y cuentan con la ergonomía adecuada para que cubra bien la parte de la nariz y la boca.
“Es un trabajo muy bonito del cual nos sentimos satisfechos todos los que estamos participando. Somos muchos. Hemos elaborado alrededor de 12 mil en nuestras casas y también tuvimos que contratar a costureras industriales para aumentar y agilizar la producción. Estos cubrebocas son para la sociedad en general”, detalló Ayala Cota.