Esta localidad tuvo su origen en la zona rural donde se asentaron los primeros grupos étnicos y donde se generó el progreso a través de la producción agrícola, sobre todo, de maíz; del “oro blanco” (algodón) y del trigo, cultivos que generaron el fortalecimiento de la economía que ha llevado a San Luis Río Colorado a ser uno de los municipios más prósperos de Sonora.
Los grupos étnicos asentados en San Luis Río Colorado tienen su origen hace más de 6 mil años y aunque en un principio eran conocidos como yumanos, con el paso del tiempo han tenido otras designaciones incluyendo la de cucapás.
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El escritor e historiador, Manuel Cuén Gamboa, contó que en 1539, cuando llegaron los españoles a esta región, nombraron a los indígenas que se encontraban en el valle como quiquimas y bajiopas, no cucapás, yumas, ni quechán, como ahora se les conoce.
Los españoles arribaron a esta zona por el Mar de Cortés hasta llegar al Río Colorado, donde tomaron posesión de las tierras, se asentaron y ahí conocieron a los grupos originarios.
Algunos miembros de las tribus indígenas que a la llegada de los españoles estaban asentados al margen del Río Colorado se autonombraron Coco-oopas.
Los primeros pobladores étnicos eran grupos nómadas porque, aunque vivían a la orilla del Río Colorado, se movían constantemente, ya que cuando no existían las presas en Estados Unidos, las aguas incontrolables del río arrasaban con todo a su paso.
Manuel Cuén indicó que cuando el río crecía, los cucapás se iban a vivir de forma temporal a la sierra del águila que es una montaña cerca de donde en la actualidad viven los cucapás de Baja California, por el rumbo del puerto de San Felipe y una vez que se secaba el agua, regresaban a lo que ahora es el valle sanluisino.
Los indígenas vivían de la agricultura, de la caza y la pesca. Eran dueños de, prácticamente, todas las tierras porque aquí vivían y en la medida que fueron llegando los “extraños” los fueron acorralando a un espacio más pequeño, pues ellos eran nómadas e iban y venían a la montaña.
A la llegada de los estadounidenses a esta región, luego de los españoles, se estableció la colonia Lerdo y Puerto Isabel, que fue donde se originó el valle sanluisino, lo que implicó que los cucapás empezaran a trabajar para ellos juntando leña para abastecer los barcos de vapor que navegaban por el Río Colorado hasta Yuma, Arizona.
Posteriormente, el gobierno de Porfirio Díaz otorgó tierras de esta zona a Guillermo Andrade y a pesar de que los integrantes de esta tribu indígena aquí vivían fueron desplazados poco a poco, asignándoles solo el ejido Pozas de Arvizu donde hasta hoy residen.
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Por su parte, el gobernador cucapá de Pozas de Arvizu, Alfonso Tambo Ceseña, informó que el dialecto Cucapá está en riesgo de desaparecer porque en la actualidad de los 250 miembros de esta tribu, solo 30 lo hablan.
En este sentido, refirió que él trabaja en coordinación con funcionarios del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas en la publicación de un libro, tipo diccionario, para promover la enseñanza-aprendizaje de este dialecto y lograr que no se extinga.
Alfonso Tambo destacó la importancia de rescatar la lengua cucapá, tomando en cuenta que forma parte de la historia, cultura e identidad de México, al igual que el resto de los dialectos.