Hoy en día, en el estado de Sonora se tienen contabilizados cerca de 1.2 millones de mujeres y 1.1 millones de hombres en un rango de edad a partir de los 15 años.
Pocos países han intentado identificar a su población en función de la orientación sexual y la identidad de género mediante métodos probabilísticos, siendo México uno de los pioneros en realizar este tipo de encuestas.
De acuerdo a un estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), el 6.2 por ciento de la población sonorense se identifica como miembro la comunidad LGBTIQ+, de los cuales el 1.5 por ciento son trans+, es decir, su identidad de género no corresponde con el sexo asignado al nacer.
Por otra parte, según encuestas del Inegi entre los habitantes del estado de Sonora,señala que el 1.9% de la población femenina y el 2% de los masculinos tuvieron su primera experiencia sexual con una persona del mismo sexo.
Las cifras presentadas por el Inegi, destacan lo siguiente: Entre las mujeres, 1.1% siente atracción erótico-afectiva hacia otras mujeres, y 19.7% hacia ambos sexos. Mientras que en los hombres, 8.2% se han declarado como gays y el 2.8% bisexual.
Es importante resaltar que la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género (ENDISEG) hasta el año 2021 proporciona información detallada sobre el volumen y la estructura de la población LGBTI+.
Estos datos son fundamentales para que los tomadores de decisiones en política pública diseñen acciones que respondan adecuadamente a las necesidades y realidades que protejan los derechos de la comunidad LGBTQ+ en el país.
¿Qué diferencias hay entre orientación sexual e identidad de género?
La orientación sexual se refiere a la capacidad de una persona para sentirse atraída, ya sea romántica o sexualmente, hacia mujeres, hombres, personas de ambos sexos, otros géneros o de no sentir atracción alguna.
Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
Por otro lado, la identidad de género es la forma en que cada individuo se percibe y se identifica a sí mismo como hombre, mujer u otro género, basado en su manera de ser, pensar, sentir y actuar; esta identidad puede coincidir o no con el sexo asignado al nacer.
