Difícil vigilar sexoservicio en Facebook

El conocido “oficio más antiguo del mundo” ha evolucionado a las plataformas digitales, sin embargo, aún no hay esquemas que permitan regularlo, por lo que, quienes se dedican a esto, no necesariamente cuenta con una tarjeta sanitaria

Luis Carlos Bravo

  · domingo 8 de septiembre de 2019

El “ligue” se da a través de mensajes web para culminar con el contacto sexual en persona a cambio de dinero / Cortesía

A diferencia de los prestadores de servicios sexuales que se ubican en algún centro nocturno o a las afueras de moteles y cantinas, el sexoservidor que interactúa vía web para después consumar el acto de manera presencial, no está obligado a llevar un control higiénico ni clínico, ya que éste carece de una tarjeta sanitaria emitida por la Dirección de Salud Pública Municipal.

Pedro Torres Rivera, director de la dependencia en mención destacó que el sexoservicio web es clandestino, pues no es supervisado por los inspectores, o bien, revisado clínicamente por su personal para verificar que los prestadores se encuentren en buen estado anímico.

Son las llamadas de migrantes asuntos de alto estrés para los operadores porque están de por medio vidas/ CORTESÍA.

El galeno dijo que en las meretrices y varones que cobran por placer pasajero bajo control sanitario es detectable algún padecimiento, con lo que se logra evitar posibles contagios entre la población, sin embargo, con un prestador de servicios que utiliza las redes sociales como intermediario para lucrar a cambio de sexo, es una tarea “casi imposible”.

“Es muy difícil llevar un control en el tipo de prostitución que se contacta vía redes sociales u otros métodos modernos, ya que se trata de un servicio clandestino que no nos da margen de supervisión”, reveló.

LA NUEVA FORMA DE PROSTITUCIÓN

Actualmente, es a través de aplicaciones en teléfonos inteligentes o desde cuentas de Facebook, donde muchos dan el primer paso para dedicarse a la denominada “profesión más antigua del mundo”: la prostitución, sin la necesidad de pararse en alguna esquina o el contacto físico en un centro nocturno, ya que el “ligue” se da a través de mensajes web entre un o una escort y un posible cliente.

Durante la administración municipal pasada, la Dirección de Salud Pública, se infiltró entre la red para dar con un par de prestadores de servicios sexuales que se anunciaban en grupos de Facebook al hacerse pasar por masajistas, a quienes se les habló de las posibles sanciones y se les invitó a obtener su tarjeta sanitaria.

ASÍ FUNCIONA

El cliente pacta una cita con el sexoservidor, luego de una charla entablada en redes sociales, donde a éste se le habla la discreción del tema y la cantidad a pagar.