Para el desaije de la lechuga, empresas que tienen sembrado este producto en tierras del Valle de San Luis Río Colorado contratan a menores de 17 años de edad, para trabajar los fines de semana.
Ernesto, encargado de un grupo de 55 personas, en dónde también se contabilizan personas adultas, que trabajan en el desaije actualmente dijo que efectivamente hay menores de 17 años en este trabajo, pero tienen que comprobar que son estudiantes y que tiene el permiso de sus papás.
De estas 55 personas al menos sientes son adolescentes de entre 13 y 15 años cuatro más son de 17 años y el resto son adultos, entres los que se cuentan a algunas mamás de los adolescentes que se mencionan.
Comentó que ganan 350 pesos por ocho horas diarias de trabajo, donde el trabajo que realizan es surcar en la tierra entre lechuga y lechuga un espacio, para que cada una de las lechugas que crecerán, puedan tener el espacio necesario para expandirse.
La jornada laboral diaria de dichas personas que trabajan en el Valle, cuenta con media hora de descanso para almorzar y a la semana tiene un día de descanso sin embargo una de las desventajas que tienen es que aunque la empresa cubre gastos médicos en caso de accidentes no cuentan con servicios médicos.
“Ahorita están en el desaije de la lechuga 55 personas. Tienen que separar la lechuga, para que crezca bien la lechuga. Son 350 pesos diarios por ocho horas con un descanso de media hora. No tienen aseguranza pero la empresa cubre accidentes”.
Agregó que las personas que trabajan en esta ocasión son del Valle de San Luis Río Colorado y que al menos en esta ocasión no están empleando a personas que vienen de otros lugares del país.
Estas personas que trabajan actualmente en el desaije de la lechuga, no fueron las mismas que trabajaron en la siembra ni las que trabajarán en la cosecha, pues explicó que la empresa contrata a diferentes personas, para cada etapa.