La señora Lupita originaria de esta ciudad menciona que su tía comenzó en marzo a vender tortillas de harina, y al ver que necesitaba apoyo, se unieron para ayudarla en su puesto.
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Dijo que las tortillas que preparan han tenido gran demanda, debido al sabor casero que tienen y para ofrecerle algo más a sus clientes, ahora también venden frijoles y salsas, lo que ha sido de agrado de las personas que acuden a este lugar.
Aseguró que no es fácil en estos tiempos mantener un negocio, por ello todos los días se esfuerzan por dar la mejor atención y ofrecer un producto de calidad, para que las personas regresen a comprarles.
En estos meses en que el calor ha estado fuerte, desde las cuatro o cinco de la mañana empezaban hacer las tortillas, por lo que sus clientes ya saben y acuden a comprar desde muy temprano, y antes de que el calor sea más fuerte dejan de vender, comentó.
Lupita espera que este negocio familiar siga creciendo y que cada vez tengan más clientes, por lo que tiene pensado que ya que los días sean más frescos pueda extender la hora de atención en su puesto, el cual se localiza en la avenida Puebla y calle 12.