Con motivo del Día de Muertos, el 1 y 2 de noviembre, muchas personas visitan los panteones para pasar el día con sus seres queridos que fallecieron. Sin embargo, estos lugares pueden convertirse en criaderos de mosquitos aumentando el riesgo de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya, por lo que se sugiere tomar las medidas preventivas para garantizar un entorno seguro.
La Secretaría de Salud de Sonora recomendó a las y los sonorenses tomar precauciones para prevenir, en los panteones del estado, la circulación del mosquito que transmite el dengue.
Cada año, en estas fechas, la institución emite una serie de recomendaciones para evitar la proliferación de criaderos de mosquitos en los cementerios, como limpiar las tumbas, nichos, macetas de jardín sin orificios o criptas donde descansan los difuntos; eliminar cacharros y maleza; tirar escombro y basura.
Otro de los puntos para evitar los criaderos es cambiar las flores naturales en agua por arreglos con flores artificiales deshidratadas o secas, los cuales se pueden armar con eucalipto, lavanda, nubecita y geranios, ya que estas duran mayor tiempo sin agua y, además, ayudan a ahuyentar a los mosquitos.
También se recomienda utilizar flores naturales en esponja floral, la cual absorbe el agua y no se queda estancada, pues cuando esto pasa los mosquitos ponen los huevecillos en agua limpia y, tan sólo en días, nacen larvas que se convierten en estos insectos.
Personal de la Secretaría de Salud destacó que las personas que visiten a sus difuntos por el Día de Muertos pueden protegerse contra el mosquito transmisor del dengue, siguiendo esta serie de recomendaciones: vestir de colores claros, usar manga larga, utilizar repelente de mosquitos que contenga DEET (ingrediente para repeler a insectos que pican), el cual se debe de aplicar por las mañanas antes de salir de casa y por las tardes antes de que oscurezca.