Yuma, Arizona. - El que no se haya aumentado durante los últimos 10 años el presupuesto a las agencias federales fronterizas ha ocasionado que el cuidado a los extranjeros que ingresan de manera ilegal al país se convierta en una carga para los contribuyentes, como en el caso del año fiscal 2018, cuando la hospitalización de mil 700 indocumentados en Yuma generó un gasto de 700 mil dólares, lamentó el Sheriff del Condado de Yuma.
Este y otros datos que le proporcionó la Patrulla Fronteriza a Leon Wilmot los reveló en respuesta al creciente ingreso masivo de indocumentados al país por el Sector Yuma, lo que considera el argumento, “no la opinión” advirtió, de que urge un muro que disminuirá el problema.
“La carga no es sólo sentida por nuestros socios federales, sino también por nuestro sistema de atención médica”, expuso, además que de los servicios de salud se requirieron más de 10 mil horas de hombre para proteger a los inmigrantes que fueron admitidos en el Centro Médico Regional de Yuma.
“Como sheriffs, nos preguntan todo el tiempo si pensamos que un ´muro´ podría ayudar, no necesitas nuestra opinión, sólo mira los hechos: el muro en el sector de Tucson fue construido en 2000, ahí las aprehensiones de extranjeros ilegales que cruzan la frontera en la región cayeron 90% durante 15 años”.
El sector de Yuma construyó su muro en 2005, recordó el también Presidente de la Asociación de Sheriffs de la Frontera Suroeste, y las detenciones de ilegales bajaron en 95% durante 9 años.
En el caso de San Diego, California, dijo que el cerco fue construido en 1992 y las aprehensiones de indocumentados cayeron 92% en los últimos 23 años.
En la frontera de Texas, en El Paso, se construyó el muro en 1993 y vio una caída de 72% en un año y 95% durante 22 años.
“El Presidente actualmente quiere un presupuesto de seguridad fronteriza que no sólo ayuda a construir un muro, sino que financiará el alivio humanitario, dará a la Patrulla Fronteriza una mejor tecnología para asegurar la frontera y pondrá más botas en el suelo”, expresó.
“Si el Presidente obtiene lo que los expertos fronterizos dicen que la frontera necesita, confiamos en que ayudará a lidiar con algunos de los problemas que estamos viendo a lo largo de la frontera suroeste”, concluyó.