La falta de conciencia y la carencia de infraestructura para el manejo y destino final de la basura provocan serios problemas en el Golfo de Santa Clara, situación que se agudizó con la actividad pesquera que añade un mayor consumo de productos cuyos empaques van a dar a la playa por quienes dependen económicamente de esta práctica
Un promedio de seis toneladas diarias de basura generan alrededor de 8 mil residentes del poblado, sumado a 3 mil de población flotante (quienes van a trabajar por la pesca), volumen que recolecta un sólo camión asignado a dicha comunidad, el cual recorre el poblado en cinco días, es decir, acude a cada hogar al menos una vez a la semana, igual que en la zona urbana de San Luis Río Colorado.
Durante una visita al poblado, sobre todo a la zona de playa donde se realiza el trasborde del aguamala, la basura parecía parte de la decoración, para colmo durante un recorrido a borde de una panga, los tripulantes llevan distintos productos para su consumo cuyas bolsas y envases son lanzados con desinterés fuera de borda, a pesar de las constantes campañas de promoción del cuidado del medio ambiente.
Más aún los cauces de los arroyos son vertederos de basura, desde empaques de alimentos hasta carcasas de refrigeradores y pangas todo ese volumen de basura, cuando llueve, es arrastrado por el agua y va a dar el mar, en perjuicio del medio ambiente.
FALTA RECOLECCIÓN
Según lo comentó el delegado del poblado Adán Castañeda, se cuenta con un recolector que al menos visita los hogares una vez por semana, igualmente lo confirmó Celio Cesar Ángulo Vallejo, quien durante dos administraciones ocupó el mismo cargo.
“La gente es un tanto desordenada, es cultural, creen que no está mal, a mí en lo particular me ha tocado participar en varias jornadas de limpieza, he traído hasta 60 personas, avanzamos un trecho y para el siguiente día ya ves basura donde se limpió, cualquier vecino con falta de conciencia va y tira su basura sin pensarlo” opinó Ángulo Vallejo.
Indicó que se colectan diariamente aproximadamente seis toneladas que se desechan en el único sitio disponible: El basurero a cielo abierto, donde los pepenadores recolectan los desechos reciclables y los venden.
Por su parte, Adán Castañeda reconoció el problema al alza por el que el poblado pasa, pues, además de los desechos que se recaudan del residente local, toneladas se suman con el turista, mayormente el que viene de Estados Unidos.
“Al concluirse eventos como el San Luis en la Playa o los días festivos del lado estadounidense, nos quedan más de 80 toneladas de basura, entre plásticos y otros desechos”, compartió.
Al entrevistar a una residente quien vive a un costado del cauce del arroyo, Elena Mascareño Vélez, expresó que el recolector los visita una vez a la semana, pero tiempo atrás, cuando fallaba, se veían obligados a quemarla, al afirmar que lo hacen en los límites de su propio predio y no en los lechos.
Sin embargo, al continuar el recorrido sobre el cauce se puede observar la constante presencia de basura, algunos restos quemados, lo que pone en evidencia que otros ciudadanos sí hacen mal uso del espacio para tirar e incinerar desechos.
Fue en octubre del año pasado cuando una precipitación provocó copiosas lluvias que causaron precisamente el arrastre de basura que taparon causes lo que provocó el desborde del agua que se introduce en viviendas situadas a un costado e incluso sobre el cauce del agua.
RESPONSABILIDAD DE TODOS
Martha Román Rodríguez, investigadora de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora, comentó que hay una serie de asuntos que se tejen en torno al desecho de basura, entre ellos la cultura, la infraestructura y servicios.
Indicó que si bien en escuelas y casas puede darse la separación por desechos orgánicos e inorgánicos falta que el servicio de recolección de basura cuente con un sistema para el traslado, a fin de que no se vuelva a revolver.
Además de que el depósito final (relleno sanitario) debe contar con los medios para evitar la contaminación de agua, suelo y aire.
Reconoció que en el Golfo existe un problema resultado del manejo de basura, que se suma a un sistema poco eficiente de recolección e infraestructura donde depositarla.
“Aquí en San Luis, cuando el recolector falla, la gente busca lotes baldíos para tirarla, lo más fácil para los golfeños es tirarla en los cauces, además con o sin buen servicio de recolección, todavía se necesita trabajar en la cultura ciudadana”, opinó.
Román Rodríguez indicó que el correcto manejo de la basura demanda trabajo desde casa, a fin de que se aprenda a ser más consientes.
“Lo ideal sería aplicar las tres erres de la ecología: Reducir, reutilizar y reciclar, para eso se hacen campañas como usa bolsa de tela o sin popote”, finalizó.
((Numeralia)
6 Toneladas de basura diaria se depositan en el relleno de basura a cielo abierto.
1 Solo recolector de basura se encarga de llevar los desechos al depósito final
Delinquen
Adán Castañeda, delegado del Golfo de Santa Clara declaró que ante la falta de al menos otro recolector de basura, en puntos del poblado se colocan contenedores y botes de basura, pero éstos son constantemente delinquidos