Las celebraciones religiosas siguen llevándose a cabo de forma presencial en esta ciudad, respetando el aforo del 25% de asistentes y las medidas sanitarias para evitar riesgos de contagio de Covid-19.
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El padre Agustín Partida Díaz Garza, encargado de la capilla Santo Niño de Atocha, apuntó que continúan las misas en los templos católicos con un número reducido de personas.
Dijo que como parte de la nueva normalidad que se vive por la pandemia del coronavirus, se solicita a la gente que asista a misa con cubrebocas y se someta a procesos de sanitización y medición de la temperatura corporal al ingresar al templo.
El padre Ramón Tapia Tapia, párroco de Inmaculada Concepción y vicario en la zona del desierto, se refirió a la importancia de que las iglesias estén abiertas, tomando en cuenta que son un bien espiritual que todos necesitan, especialmente, en tiempos de crisis sanitaria en que la población atraviesa por situaciones complicadas de depresión, ansiedad, falta de esperanza y de Fe.
Destacó que mantienen comunicación con autoridades del Gobierno de San Luis y asisten a las reuniones del Comité Municipal de Salud para conocer las estrategias a implementar para mitigar la propagación del virus.
