Ante la aprobación en la Cámara de Diputados de una ley que promueva la legalización de los vehículos de origen extranjero, denominados “chocolate”, el negocio de compra-venta de dichas unidades automotrices se vería beneficiado, ya que al eliminar el papeleo de ingreso y legalización en territorio mexicano podrían reducir considerablemente los precios finales.
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Al respecto habló Gerardo Esquer Terán, propietario de una conocida yarda ubicada en la colonia Residencial, compartiendo que es una gran oportunidad para este tipo negocios.
“De hecho, actualmente se encuentran abiertas las importaciones para modelos vehiculares del 2000 en adelante, pero al ser así los precios son muy elevados. Si se adquiere un automóvil que quiera nacionalizarse, pues sale más caro la documentación que el mismo vehículo”, destacando que de aprobarse la ley habría una ampliación laboral y mayor recaudación de impuestos por parte del gobierno, beneficiando tanto al giro comercial como al fisco.
“Tenemos años esperando. Por el bien de la gente ojalá y sí se haga, y que se logre con un precio justo, un costo que se estandarice. (…) Comúnmente, se utilizan tabuladores, y dependiendo del modelo del auto, el estilo o gama y su condición legal, ya sea importado o no, será el costo final de venta. No es lo mismo vender un vehículo tipo vagoneta sin importar a 1 mil 600 dólares a importarla y venderla a 4 mil 500 dólares. Sería muy elevado, y si tenemos esa ley, podríamos subirlo para solo recuperar el gasto de reparación y paso por la aduana, tal vez a unos 2 mil 500 dólares”.
En la regularización de vehículos traería amplios beneficios a la recaudación de impuestos
Yarderos de esta ciudad esperan que se contemple la liberación del vehículo desde EE. UU.