Para prevenir y detectar el abuso sexual infantil es importante que los padres de familia o cuidadores mantengan comunicación con sus hijos y estén atentos a los cambios de conducta que presentan, pues generalmente los agresores son familiares cercanos.
El abuso sexual a niños y niñas se efectúa cuando una persona de la misma o mayor edad los obliga a tener contacto sexual a través de caricias, besos, tocamientos, ver y escuchar pornografía y/o exhibir los genitales o cualquier comportamiento de tipo sexual.
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La psicóloga Laura Álvarez Ríos, presidenta de la Asociación de Profesionistas de la Psicología de San Luis, habló del tema de abuso sexual infantil destacando que los padres de familia o persona que esté a cargo del cuidado de un infante, debe creerle cuando declara que sufrió abusos deshonestos o sexuales. En ese momento, es necesario preguntar qué fue lo que pasó y quién fue el agresor. Todo esto de una manera tranquila para crear un ambiente de confianza que permita que el niño cuente lo sucedido.
Laura Álvarez señaló que otra manera de detectar este tipo de situaciones, es el cambio de comportamiento del menor. Por ejemplo, hay quienes se aíslan, se muestran agresivos y si antes eran muy activos se vuelven pasivos. Esos son focos rojos que pueden indicar abuso sexual.
También hay casos de menores que reciben amenazas por parte del agresor que los obliga a quedarse callados. Es ahí cuando los padres de familia deben estar atentos a los cambios de conducta.
IMPORTANTE TENER COMUNICACIÓN CON LOS HIJOS
La psicóloga externó que, aunque el niño o niña se queda bajo el cuidado de familiares, mientras mamá y papá trabajan, se les debe preguntar a diario si les pasa algo, qué hicieron durante el día, qué comieron, a qué jugaron y si alguien les hizo algo que no les gustó o los lastimó.
Sobre qué hacer al detectar que un niño o niña fue abusado sexualmente, Laura Álvarez refirió que lo primero es hablar del tema con el resto de la familia para detectar si hay otros menores, hermanos de la víctima, que también hayan pasado o estén pasando por una agresión similar.
Es de suma importancia demostrar amor y apoyo a la víctima y a pesar de que el proceso que se vive al hacer la denuncia ante las autoridades correspondiente, es fuerte, debe darse a conocer para que se investigue al agresor.
Tanto la víctima como su familia deben someterse a un tratamiento psicológico para que logren superar esta situación. En el caso de los padres o madres, la psicóloga destacó que algunos quedan en “shock” al enterarse de lo sucedido y se culpan porque no se dieron cuenta antes y porque dejan a sus hijos “solos” al cuidado de alguien más.
El abuso sexual es una realidad que enfrentan las personas desde su primera infancia hasta la adultez, por ello, la importancia de enseñarles a niñas y niños el conocimiento, respeto y cuidado de su cuerpo y hacerlos conscientes de nadie puede tocarlos ni obligarlos hacer cosas que los hagan sentir incómodos o les causen daños.
Para concluir, Laura Álvarez sugirió a los padres de familia que, al llegar casa, luego de trabajar, platiquen con sus hijos por lo menos 20 minutos para preguntar cómo les fue en su día, qué hicieron y cómo se sienten en ese momento pues así podrán detectar situaciones desfavorables.