Este lunes, el gobierno de Estados Unidos anunció un nuevo plazo para la reapertura de la frontera con México, por lo que, es el 21 de octubre, es hasta ahora la fecha para permitir ingresos no esenciales a territorio estadounidense.
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Sin embargo, más allá de la labor para contener la propagación del Covid-19 tanto en México como en Estados Unidos, trae consigo efectos encontrados como una activación económica irregular en los comercios del lado fronterizo mexicano.
A FAVOR Y EN CONTRA
Para la comerciante Martha Alicia Núñez de “Antojitos Alicia”, el cierre de la frontera a temas no esenciales no ha significado de ayuda para los vendedores de comida ubicados en el primer cuadro comercial, pues desde que se cerró el límite fronterizo bajaron sus ventas.
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“Nos hace falta que se mueva más el dinero, pues desde el cierre de la pandemia, no hemos visto circular mucho dólar como antes. Nos urge que se reabra la frontera, pues, además, las condiciones ya están dadas, ya mucha gente de aquí y de allá de Estados Unidos ya están vacunados”, expresó.
Por su parte, el comerciante Noé González, propietario de un par de establecimientos en el Centro, dijo que a quienes se dedican a la ropa, calzado y todo lo que no sea aumentos, les ha ido muy bien con el cierre indefinido en la frontera, pues notan cómo se retiene el dinero de este lado.
“Hemos generado más ventas que antes de la pandemia, nos ha ido muy bien y eso se debe a que la gente, ante el limitante de cruzar a Estados Unidos hace sus compras necesarias en el comercio local”.
Por su parte, el empresario restaurantero Francisco Chávez dijo que el sector al que representa ha reportado un incremento en sus ventas, y se trata precisamente por parte de todo ese residente local que antes lo invertía en Estados Unidos.
Fue el lunes por la mañana cuando el coordinador de la Casa Blanca para la pandemia de Covid-19, Jeff Zients, dio a conocer que la nueva extensión durará hasta el 21 de octubre, pese a la decisión de Canadá de permitir el ingreso de los estadounidenses que hayan completado su esquema de vacunación para viajes no esenciales, como el turismo, a partir del 9 de agosto.
Estados Unidos ha extendido las restricciones extraordinarias en las fronteras con sus dos vecinos mensualmente desde marzo de 2020, cuando las impuso para afrontar la pandemia de Covid-19.