Chester, es un perrito nacido en Mexicali, y desde que tenía un mes y medio de nacido, fue criado por Raúl Orduña, juntos han pasado aventuras y viajes por México y Honduras.
¨Venimos por acá y ando con él, en su tierra, porque él aquí nació, en Mexicali¨.
Raúl Orduña, vino solo a Mexicali desde hace algunos años a tratar de pasar la frontera hacia los Estados Unidos en busca de una vida más estable, pero tiempo después se regresó a su natal país; esta vez ya no iba solo, quien lo acompañaba era Chester, su perro, que en aquel entonces apenas era un cachorro de pocos meses.
¨El perro es de aqui de mexicali, cuando me lo dieron tenía un mes y medio, se crió allá en mi país, me lo llevé a honduras y me lo volví a traer¨.
Sentado en su silla de ruedas, Raúl narró que ha pasado de todo junto a Chester, altas y bajas, lo alimenta y lo cuida en todo momento; “cuando era pequeño un gato le destrozó un ojo”, comentó.
Como buen dueño y amigo, Orduña, le dio los debidos cuidados que necesitaba en su herida, pero Chester lamentablemente no quedó bien.
Actualmente Chester y Raúl no cuentan con vivienda en Mexicali, duermen en albergues o en parques públicos.
¨Lo llevo por aquí y por allá, ando en la sombra, a veces cuando puedo lo baño, encuentro agua para mojarlo para que aguante el calor, porque está muy fuerte y también pueda saciar su sed¨
¨Ellos como animalitos no tienen cómo cuidarse solos, pero sin embargo hay que tratar de protegerlos, porque es peligroso, en este calor se pueden morir¨, señaló.
Así, estos amigos de la vida sobreviven en una ciudad que los abraza con un verano que supera los 40 grados centígrados