Para esta temporada de algodón, se pronostica que la superficie de ese producto sea menor a la que se tuvo en el 2019, que fueron más de 7 mil hectáreas, y ahora con trabajos alcanzarían las cuatro mil.
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El presidente de la Junta Local de Sanidad Vegetal (JLSV) Ernesto Loera Orozco, informó que en el organismo, se tienen permisos de siembra por mil 500 hectáreas, pero los módulos de riego llevan permisos por 2 mil 669.
“La siembra ve muy despacio, hay una diferencia de más de mil 500 hectáreas de permisos que han dado los módulos y que no han llegado aquí; se consideraba que iba a ser más superficie de algodón de este año y al parecer no será así”.
Agregó que es muy complicado que llegue a cuatro mil hectáreas, cuando en el ciclo pasado se tenían 7 mil 300.
Dos situaciones
Dijo que hay dos fenómenos que influyen en esta situación, que la gente está descapitalizada y el tipo de cambio.
“En la actualidad, tenemos 95 hectáreas de algodón sin pizcar, cuándo la van a pizcar, cuándo la van a comercializar y cuándo lo van a pagar, son las dudas que se tienen; se va a ir todo abril y parte de mayo con esa situación, y la gente no tiene dinero”.
Lamentó la falta de apoyo gubernamental para el algodonero, que en este sexenio se terminó, y con eso fuera de la ecuación, es difícil salir adelante.
Por otro lado, lo que les ayuda un poco es el tipo de cambio, ya que los agricultores ganan un poco más porque venden el producto en dólares.
“Los bancos pagan el dólar en 23 a 24 pesos, eso les ayuda porque venden un poco mejor el algodón a sus clientes, y están aprovechando eso”.
El dólar les ayuda un poco a los algodoneros, puesto que los bancos pagan a 23 pesos cada billete verde.
La gente está descapitalizada, ya que no hay respaldo gubernamental para sacar el producto adelante.